Así lo indicó ayer a los periodistas su hermana, Victoria, después de que María José Carrascosa haya sido condenada a 14 años de cárcel por un conflicto relacionado con la custodia de la hija que tuvo con un estadounidense.
Victoria explicó que prefiere que su hermana no recurra la sentencia porque está convencida de que nunca le darán la razón en los tribunales de Nueva Jersey, aunque si decide recurrirla, agotará los 45 días de plazo para en ese tiempo lograr una solución civil, en referencia a un acuerdo extrajudicial.
Acusó a la Policía y a la Fiscalía de Nueva Jersey de supuesta corrupción “por presionar a testigos para que declarasen” en contra de María José, y citó agresiones al hermano de un testigo y amenazas a ella misma que denunció.
Respecto al Gobierno español, pidió que haga de respetar el sistema judicial español y las sentencias dictadas en este país, en las que se ha catalogado a Peter Innes, el padre de la hija, de “psicópata”.
“Si las autoridades españolas quieren un acercamiento con las españolas, tendrán que acatar las sentencias de España”, aseguró Carrascosa, tras reiterar que la niña, de 9 años, no va a salir del país.
La niña, que vive en acogida con sus abuelos maternos pero su custodia la tiene la Generalitat, se encuentra bien.
Victoria señaló que si se produjese un acuerdo extrajudicial, el padre de la niña debería visitarla en España, “y no que una niña de 9 años salga" del país.
Sobre la defensa de María José, afirmó que no ha tenido “un buen abogado, ni siquiera el último, porque no ha entregado las pruebas” de maltrato de Innes a su hermana y se ha referido en este sentido a los caseros de ésta que fueron testigos de agresiones “que ponen los pelos de punta”.
Tras conocer la sentencia, María José se mostró “abatida e indignada”.
