La Delegación municipal de Infraestructuras y la empresa concesionaria del servicio público del agua en la ciudad, Aqualia, trabajan conjuntamente en la mejora continua de la red de abastecimiento. Con este objetivo, actualmente se ejecutan obras en la calle Vicente Escrivá, en la barriada El Portichuelo.
El presupuesto de esta actuación, más otras en las calles San Miguel, Lebrija y Barranco Caldereros, llega a los 133.000 euros.
Hasta la zona en obras se desplazaba el alcalde, Isidoro Gambín, con los delegados de Infraestructuras y Urbanismo, Diego Carrera y Juan Ramón Barroso, para comprobar el desarrollo de los trabajos. Según explicaban los representantes municipales, en la actualidad la red de abastecimiento instalada en esta calle de El Portichuelo presenta continuos casos de roturas de la tubería de polietileno existente, generando cortes en el suministro y gran malestar en el vecindario. De ahí que Ayuntamiento y Aqualia hayan decidido instalar aproximadamente 335 metros de tubería de fundición dúctil de 100 milímetros (material más resistente que el polietileno), cuyo trazado discurrirá por la calzada.
Además, se sustituyen las acometidas particulares afectadas en el tramo a renovar, se realizan las conexiones de la nueva conducción a la red existente y se instalan las válvulas de mariposa necesarias para el control del tramo.
Tanto Isidoro Gambín como Carrera han destacado que las obras “son soluciones a problemas que afectan a los ciudadanos”. Según manifestaba el alcalde, “la cantidad de trabajos que la población puede contemplar estos días simultáneamente en las calles de Arcos de la Frontera es sinónimo de que la ciudad va mejorando en sus infraestructuras, aunque haya que soportar las lógicas molestias mientras se realizan”.
