El PSOE de La Línea aclara que el Consejo de Ministros ha tumbado por inconstitucional la convocatoria de una consulta popular prometida por Juan Franco durante la campaña de las elecciones municipales de 2019 para la conversión de La Línea en Ciudad Autónoma.
Según los socialistas linenses, esta consulta fue la gran mentira electoral con la que Juan Franco se presentó a las municipales de 2019, una promesa que sostiene asumió ante los ciudadanos a sabiendas de que era inviable.
La secretaria general de la agrupación del PSOE de La Línea y diputada nacional por la provincia de Cádiz, Gemma Araujo, ha lamentado “el engaño que supuso para los electores linenses votar algo que Juan Franco sabía que era ilegal. Él conocía desde el principio que ésta sería la respuesta del Gobierno porque así lo refleja en el propio informe encargado al efecto por el propio Ayuntamiento, que costó 8.000 euros y que pagó con dinero de todos los linenses a sabiendas de que su propuesta no tendría recorrido por ser ilegal. Hasta aquí ha llegado por tanto la gran mentira de Juan Franco con la Ciudad Autónoma”.
Araujo vuelve a incidir en la falta de capacidad política y de liderazgo del alcalde “porque no se ha motivo en todos estos años en mantener ni una sola reunión con Administraciones supramunicipales para hablar de la situación de La Línea y ahora querrá echarles las culpas de su propia ineficacia e inutilidad. Ha perdido siete años engañando a los linenses sin mover ni un solo dedo por pelear por esa singularidad en la que tenía la unidad de todos los partidos políticos”.
“Jamás nunca La Línea recibió tanto dinero de las Administraciones para ejecutar todos los proyectos de los que presume el alcalde, aunque todavía no ha explicado cuántos puestos de trabajo han generado en el municipio. Cada vez que le pedimos que destine el dinero que recibe a medidas sociales prefiere gastárselo en actuaciones musicales, luces, fiestas y en las empresas privadas que tan a gusto están trabajando con este ayuntamiento”, añade la responsable local del PSOE.
En este sentido, afirma que cuando se trata de gestionar, Juan Franco hace aguas por todos lados. “Véanse los nuevos juzgados, la futura comisaría o cómo está gestionando de mal el conflicto en la barriada de Periáñez o en la calle Crespo”.
Por todo ello, Araujo se pregunta qué va a hacer ahora el alcalde, que ya ha anunciado que acudirá al Tribunal Supremo: “¿Irá contra el Estado?.¿Querrá que lo sigan llamando el Puigdemont del sur y seguir haciendo el ridículo como todos estos años? Debe volver a la senda del diálogo con las Administraciones en busca de la singularidad del municipio. En ese camino encontrará al PSOE, en el otro, con lo que puede encontrarse es con la justicia. Debe comenzar a trabajar por los ciudadanos en lugar de engañarlos con un reclamo electoral que, insisto, sabía que era una quimera y un canto de sirena”.