Una tradición como la festividad de Tosantos y los puestos del Mercado ataviados que, aunque no se pierden, se modernizan. Y es que la americanización de Tosantos ha hecho que los propietarios de los puestos pasen del cochino enchaquetado a la gallina zombi. Sin embargo, todavía hay quien no se refugia en los motivos de Halloween y se buscan la vida con, por ejemplo, una recreación del la Plaza pero con cabezas de pescado.
Aunque bien es cierto que no fueron muchos los que decoraron sus puestos, la idea más extendida fue el entierro del malogrado pulpo Paul. Aquel que predijo la victoria de España en el Mundial de Sudáfrica y que hace unos días se marchaba al cielo de los cefalópodos.
No obstante, el ambiente en Las Bodegas, a pesar de la amenaza de lluvia, fue bueno. Duendes, brujitas, calaveras y demás disfraces mortíferos fueron apareciendo por los alrededores de Las Bodegas, acompañados por padres y abuelos que se congregaron en la fiesta.
Por otra parte, el martes arranca el ciclo de terror un título clásico El resplandor, de Stanley Kubrick. Un día después se proyecta Rec (2007), de Jaume Balagueró, mientras que el jueves, también del mismo director, habrá una sesión doble, con Darkness y Para entrar a vivir. El ciclo se cierra con La novia cadáver, de Tim Burton, proyección de dibujos animados. La entrada para todas las películas es gratuita, tras retirar la invitación en taquilla. Las actividades se cierran el sábado 6 de noviembre cuando se ponga en escena Don Juan Tenorio, de Zorilla.
