Arcos cerraba el fin de semana sus fiestas de Carnaval dejando un impresionante reguero humano en las calles con motivo de la cabalgata oficial. Un gran ambiente, incluso agobiante en ocasiones, para disfrutar tranquilamente del pasacalle.
El día más multitudinario de Carnaval encontró a miles de personas ávidas de exhibir todo tipo de disfraces, muchos de ellos colectivos y sobre las plataformas tiradas por tractores y que un año más se antojaron auténticas discotecas al aire libre. La caravana partió de la avenida Alfonso X El Sabio, y tras un recorrido por el Barrio Bajo fue buscando el casco antiguo, donde se vivirían momentos de auténtico agobio por la avalancha y la estrechez de las calles.
La imagen de masiva participación encontró su máxima expresión en la calle Corredera donde no cabía alfiler y apenas se podía pasear.
La multitud se fue abriendo camino para disolverse en el entorno del Paseo dirección a los bares y sobre todo a La Botellona del recinto ferial. Según la Policía Local, la cabalgata discurrió con normalidad en líneas generales, sin incidentes graves que reseñar salvo los tristemente clásicos casos de intoxicación etílica entre menores. También los vecinos del casco antiguo han criticado la cantidad de orina que corría por las calles y que algunas personas no mostraran vergüenza alguna por miccionar en público. Pero éste suele ser el lado más decadente de la cabalgata y con el que no se puede hacer nada que no sea a golpe de sanción.
La noche de desenfreno daría paso a un espléndido domingo que pareció claramente de primavera, con las agrupaciones actuando en el ‘tablao’ de la plaza América ya para un público más atento a las letras y puesta en escena.
Antes, el viernes fue el día de los escolares con su salida en pasacalles desde diversos colegios de la localidad. La imagen se vivió desde Las Canteras hasta el Barrio Bajo, en muchos casos con niños y niñas muy pequeños disfrazados acompañados de sus padres.
Los más ‘jartibles’ de Carnaval tienen una última cita el próximo fin de semana en Jédula, donde desde hoy mismo tienen lugar los primeros actos oficiales que acabarán el domingo con ‘La Chorizá’, la fiesta gastronómica que este año deja en la plaza Diputación la actuación de las agrupaciones locales y del primer premio de chirigotas en el teatro Falla, ‘Los exagerados’.
