La primera reunión entre el comité de empresa de la fábrica de Roca en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y la dirección de la compañía, celebrada hoy, se ha cerrado sin acuerdo entre las partes, por lo que los empleados han asegurado que están "decepcionados".
Así lo ha explicado a Efe Carlos Cortés, portavoz del comité de empresa, quien ha dicho que la patronal "sigue obcecada en cerrar el centro", a pesar de que ellos le han ofrecido argumentos para que se deje abierto porque es viable y se trata "simplemente de una deslocalización de la producción".
Ha señalado que la empresa ha negado esos argumentos, por lo que se le ha presentado un informe económico sobre su viabilidad, al que les han dicho que contestarán tras estudiarlo "lo antes posible".
Ha asegurado que no están nada satisfechos porque tenían alguna esperanza de conseguir un acuerdo positivo para los trabajadores, por lo que se marchan "decepcionados" del encuentro.
La empresa les ha convocado el próximo lunes por la mañana en Madrid para llevar a cabo una segunda reunión, en la que todavía no estarán presentes los compañeros de la fábrica de Alcalá de Henares, aunque la previsión es que sí estén en los dos últimos encuentros que se produzcan.
Los trabajadores mantendrán las movilizaciones previstas hasta el momento y seguirán con la huelga de un mes que comenzaron el pasado martes en protesta por el cierre de la planta sevillana, que supondría la extinción de 228 empleos
