Después de una semana de camino en la que se han vivido y experimentado intensas emociones, la Hermandad del Rocío de El Puerto ha llegado finalmente a casa. “Este año hemos tenido la suerte de que la Virgen ha estado mucho tiempo y muy cerca de nosotros, con decirte que incluso podíamos tocar los varales. Además, el tiempo que ha estado, siempre lo ha hecho de frente a nuestro ‘simpecado’, lo que para nosotros es un alegría”, ha explicado el hermano mayor de la hermandad, Javier García.
En este sentido, la última jornada de camino concluyó con el bautismo de los hermanos que realizan el camino por primera vez (unos 14 adultos este año), y el posterior embarque y llegada a El Puerto. Posteriormente, sobre las 18.00 horas, los romeros se acercaron hasta el monolito de las Marías, para rezar una salve y, seguidamente, acudieron a la Iglesia Prioral para realizar una ofrenda de flores silvestres del coto a la patrona de la ciudad, Nuestra Señora de Los Milagros, para acabar en San Joaquín. Sin embargo, y tal y como ha destacado Javier García, los hermanos no dan conclusión a la romería hasta este sábado, donde tendrá lugar en la parroquia de San Joaquín una misa de acción de gracias en la que se harán también diversas ofrendas.
En lo que ha sido el camino, a excepción de alguna incidencia en el tráfico, todo ha transcurrido con normalidad. No obstante, el hermano mayor del Rocío ha subrayado que este año, “ha sido un camino raro”. “Lo he comentado con otros hermanos mayores de Jerez o Sanlúcar y todos teníamos esa percepción de que había sido un camino raro, con mucho frío, mucha lluvia o días totalmente despejados”, ha indicado.
Por otra parte, García ha querido agradecer la colaboración del Ayuntamiento portuense al cederle dos agentes de Protección Civil que han acompañado a los romeros durante los viajes de ida y vuelta. “Han venido dos técnicos que han atendido picaduras, virus o algún que otro incidente mayor que ha permitido actuar con gran rapidez”, ha apuntado Javier García.
Ahora ya solo queda hacer balance, analizar las posibles incidencias o problemas que hayan surgido y subsanarlos de cara al próximo año.
