Entre las muchas actuaciones llevadas a cabo este verano por los agentes adscritos al nuevo servicio de Policía de Playas, figuran las llevadas a cabo con perros que deambulaban por Rinconcillo y Getares, incumpliéndose con ello la normativa de playas que lo prohíbe expresamente.
Según la estadística aportada por la Policía Local, los agentes actuaron ante un total de 21 casos de perros, 8 de ellos en el Rinconcillo (2 de ellos abandonados y 7 con dueño) y 12 en Getares (6 con dueño y otros seis sin él), y cada uno en circunstancias diferentes y sancionados por estos hechos. Así, en la playa de Getares, dos de ellos llegaron a morder a otros tantos bañistas.
En caso de que los perros deambulen en solitario por las playas, la Policía Local da aviso a la empresa El Refugio, concesionaria del servicio de recogida y cobijo de animales abandonados, que inicialmente intentará localizar a su propietario. Cuando va acompañado del propietario, se actúa de forma diferente en funciones de la raza del perro y en las condiciones en que lo lleve, informando que la normativa prohíbe sacar a los animales a la playa y que se sanciona por ello.
La Policía de Playas es un servicio puesto en marcha por éste equipo de gobierno a través de su delegación de Seguridad Ciudadana, que el año pasado estuvo en funcionamiento a modo experimental y que éste año se ha puesto de forma continuada a la vista de los buenos resultados obtenidos. Hacer respetar la normativa de playas está entre sus funciones, y dentro de ellas evitar la presencia de animales. El teniente de alcalde delegado de Seguridad Ciudadana, Jacinto Muñoz, ha explicado que lo que se pretende es educar a los ciudadanos en el cumplimiento de la norma, preservando la seguridad de las personas que se encuentran en la playas, y mejorando la sanidad e higiene de las playas.