El tiempo en: Arcos
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Jaén

La era de los infantes del aparato

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai

He repasado en el pausado transcurrir de agosto, con alborozo y detenimiento, los significados del universo básico de un niño de apenas dos años y medio, mi hijo pequeño, un bebé que aspira a crecer en autonomía sin haber abandonado aún un solo instante la confortable seguridad del estado central familiar. Nadie, sin embargo, podrá cuestionar su conocimiento profundo del microcosmos en que se desenvuelve: los resortes que lo sostienen y las claves de funcionamiento interno del clan -que maneja con soltura y le privilegian del resto de niños del mundo en los metros cuadrados que comprende la casa de sus padres -.  ¿Quién, si no él, pues, para reclamar pleno dominio y posesión del  territorio en caso de ausencia de mamá y papá? La ardua reflexión agosteña me condujo inconscientemente al punto en que lo dejamos a finales de julio. Sí, en efecto, a Susana Díaz y el presuroso advenimiento de su héjira.


Un producto genuino del aparato que rompe el molde de los liderazgos históricos del PSOE en Andalucía, de la estirpe de prohombres del guerrismo y del felipismo que nos gobernaron, ininterrumpidamente, durante los últimos treinta años. Escuredo, Borbolla, Chaves y Griñán pertenecen a ese pasado reciente de ilustres sexagenarios que pueblan las estancias de San Telmo de retratos solemnes y marcos oxidados. Arriba hoy la era de los infantes, alumnos aventajados de Luis Pizarro o Gaspar Zarrías que, sin mayores méritos acumulados en el mercado laboral –puro y duro- o en sus carreras académicas y profesionales- en repetidos cursos, inexistente-, ascienden a la más alta representación institucional de la región.
La cohesión del PSOE-A se garantizaría, de aquí en adelante, retrotrayéndonos al modelo de antaño de cuotas provinciales. Así, en la agrupación jienense del incontestable Paco Reyes se da por hecha la salida del Ejecutivo de Mar Moreno y el relanzamiento de Micaela Navarro. Nada en firme hasta finales de semana. Algunas especulaciones apuntan hacia el acomodo de Mar al frente del grupo parlamentario en el supuesto de que Mario Jiménez forme parte del  nuevo Gobierno, aunque ese mismo premio de consolación suene para Micaela si finalmente la presidenta Díaz mantiene la estructura actual de consejerías–como se barrunta- y más concretamente a María Jesús Montero en el departamento de Salud y Bienestar Social.
Siempre restará para los socialistas de Jaén el sueño frustrado de  volver a controlar la consejería de Agricultura, cargo para el que postulan por costumbre –como en cada remodelación- , al apacible Felipe López. O conformarse con la promoción de la actual directora general de Desarrollo Territorial, Rosa Ríos, otrora parlamentaria por Jaén y esposa de Mario Jiménez. Susana y los difíciles equilibrios terminarán por ahormar la alineación titular, con la continuidad asegurada de los tres consejeros de IU, la salida del equipo económico y la incorporación de estrechos colaboradores de la flamante lideresa, caso de Verónica Pérez o Fernando Rodríguez Villalobos por citar solo dos ejemplos.


Tanto a Guille, mi nene, como a la presidenta in péctore de la Junta, de todos modos, este tipo de dimes y diretes les traen sin cuidado. Cuando lo que prima es la parentela, salga o no el sol por Antequera, hay envites ganados de antemano. Angelicos.

La comanda sindical y otros conceptos

La juez Alaya cumplimenta escrupulosamente los pronósticos e imputa a los dos delegados sindicales de Cárnicas Molina (Damián Jiménez, de CCOO, y Luis García de los Reyes, de UGT) que facilitaron al conseguidor Juan Lanzas la concreción del ERE en su empresa a cambio, presuntamente, de colar a sus respectivas mujeres en las pólizas de prejubilación de dos industrias, Hitemasa y Dhul, en las que nunca llegaron a trabajar. Prebendas y gajes del oficio. Entretanto, emerge con estrépito a la luz pública la factura emitida a la UGT por el restaurante de IFEJA, Casa Herminia, por una comida multitudinaria celebrada en las vísperas del Día de la Mujer Trabajadora de 2011. Pese a que el sindicato puede justificar gastos por comidas internas con cargo a la partida anual de ayuda de la Consejería de Empleo, cambiarle el concepto (“reuniones de los órganos de representación”) para eludir reparos en la posterior fiscalización ha terminado por otorgar torpemente cuartos al pregonero. 21.600 euros entre 1.600 comensales, es decir, 13,5€ por cabeza, un precio ajustado que se transformó en escandaloso por mor del concepto.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN