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Jerez

“Voy a luchar hasta el último día para que se haga justicia”

Jerez se manifiesta este lunes en el Día Mundial contra la Violencia de Género con un recuerdo especial a la joven de 21 años que murió en plena calle apuñalada el pasado mes de junio. Sus padres, que cada día la echan más de menos, acudirán al homenaje

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  • José y Mari, padres de Miriam. -

Ni Miriam Tamayo, ni ninguna otra mujer tendría que ser “protagonista” mañana lunes de los actos de repulsa contra la violencia machista que llevará a cabo Jerez y todas las localidades de España para condenar esta lacra en el Día Mundial contra la Violencia de Género. En esta ciudad, los globos morados que se lancen mañana llevarán el nombre de Miriam, la última víctima mortal de la violencia machista y de sólo 21 años, después de que el pasado 12 de junio fuera apuñalada en la calle y a plena luz del día a manos de su ex novio y padre de su hijo, Germán J. G.


Sus padres ya se echaron a la calle a las pocas semanas de este trágico suceso para pedir justicia y este lunes estarán de nuevo en la manifestación y los actos que ha preparado el Consejo local de la Mujer. Será un duro trago para José y Mari, que a medida que pasan los días “estamos peor”. De nuevo, sacando fuerzas de flaqueza de donde ni ellos saben, acudirán físicamente y seguirán haciéndolo siempre que puedan para impedir que el episodio de Miriam se vuelva a repetir.  


“Vamos a estar en todo momento y en todas las cosas que hagan para mi hija para que esto no suceda más. Yo no sé como matan a las mujeres así como así y lo barato que cuesta matar a una persona y la poca importancia que se le da a una vida”. Son palabras de Mari, que a sus 45 años ha sufrido el peor golpe que puede recibir una madre al sobrevivirle a una hija y ver que se la arrebataban de la forma más cruel en la que una persona puede abandonar este mundo. Después de casi seis meses, Mari sigue sin creerse que esta pesadilla sea real. “Lo estamos viviendo fatal; no nos lo creemos todavía. La tenemos presente en todo momento, pero yo me derrumbo mucho, yo no estoy fuerte en esto”, relata emocionada.


El sacar adelante a su nieto, que ya da sus primeros pasos, la lucha porque se haga justicia en el crimen de su hija y su fe -tanto Miriam como su familia forman parte de una Iglesia Evangélica jerezana- son las razones por los que sus padres se levantan día a día. “Hemos encontrado mucha fuerza; mucho consuelo, si no tuviéramos al señor no sé dónde estaríamos Dios mío, porque yo creo que la fuerza nos la está dando él.  Él y mi niño, que es el que me hace levantarme cada mañana para luchar por él; pero qué mal lo estamos pasando, yo echo mucho de menos a mi hija, porque me hace mucha mucha falta”.


Mari no puede evitar volver a emocionarse.Normalmente, como ella misma relata, llora cuando está sola “cuando me derrumbo y pienso en mi hija”, porque no le gusta hacerlo ni delante de los suyos  ni de su pequeño, del que ahora mismo tienen la custodia y al que “desde que su madre se fue” dejaron de llamarlo por su nombre, Germán, el mismo que su padre. Cada día se parece más a su hija y en un futuro esperan poder adoptarle y cambiarle el nombres y los apellidos, aunque saben que el proceso es largo. Aunque todavía es muy pequeño, sus abuelos quieren que siempre tenga claro quién fue su madre. “Él ya ve la foto de su madre y le da besitos. Nosotros se lo estamos inculcando; queremos que la tenga presente. Del padre no se habla ahora mismo”, explican.

“Jerez se ha volcado”
Además de sus hermanos del culto, esta familia también tiene palabras de agradecimiento para Jerez, después de que incluso personas que no los conocen, los paren para preguntarle cómo están. “Aquí se ha volcado todo el mundo”, señala. Al altar en el que ocurrieron los hechos después de casi seis meses nunca le faltan ni velas ni flores. “He ido una vez, porque tenía la necesidad de ir. Fui con una amiga de ella, le encendí una vela pero ya no he ido más, ni con mi hija mayor. Yo paso por esa zona, por todas las partes por las que ella pasaba y me vienen muchos recuerdos,  y cuando voy por la calle, veo chiquillas así de su edad y me creo que son mi hija. Es que es muy duro, es muy duro sobrellevar esto día a día”. Su marido, no ha tenido fuerzas para ir.
Aún no se lo explican. Han recibido “el palo más grande mi vida” del padre de su nieto y ex pareja de Miriam, con el que empezó a salir muy joven.

“Lo trataba  como un hijo más y me ha destrozado mi vida”, por ello, estos padres tienen claro que van a luchar “me cueste lo que me cueste y hasta el último de mis días, aunque se me vaya la vida en ello, para que se haga justicia y cumpla la pena máxima. Y si tengo que coger firmas de Jerez entero lo voy a coger, pero tiene que cumplir la condena íntegra. Espero no estar en este mundo cuando él salga de la cárcel”.  Mientras tanto, José tiene sus dudas: “Yo creo más en la justicia divina que en la de aquí, eso es muy difícil...y entonces Mari le interrumpe: “será muy difícil pero yo voy a luchar por eso”. En estos momentos, como explica el abogado y portavoz de la familia, Marcos Rodríguez, el Juzgado de Violencia de Género que instruye el caso está pendiente de analizar las pruebas periciales, entre el informe forense de la joven y los psicológicos realizados al imputado desde la cárcel, por lo que aún resulta aventurado hablar de cuándo habrá fecha de juicio.


Ese fatídico día, cuando Miriam una mañana más se despidió de su madre, nunca se imaginaría que no la volvería a ver más con vida. Poco antes de lo ocurrido, su exnovio les había subido a su casa de Tomás García Figueras -vive muy cerca- a su hijo, al que había recogido un tiempo antes. “Estaba normal, como siempre”, explica Mari. Y es que, al margen de las  riñas habituales, Miriam nunca les contó que hubiera sufrido algún episodio violento, o de amenaza por parte del que había sido “su novio de siempre” -nunca denunció- y con el que había terminado definitivamente hacía ocho meses.  “Si hubiera habido algo antes, cualquier mijita, esto no pasa en la vida”, lamenta su padre, por eso todavía no se explican cómo ha podido pasarles esta tragedia en casa.


“No seguían juntos, pero él venia casi todos los días y se llevaba a su niño. Estuvo dos años en la cárcel por robo por intimidación y ella iba a verlo. En aquel entonces, hablé con mi hija pero como ella lo quería y estaba cegada..., lo que yo no quería es que mi hija al yo impedirle el estar con él se fuera de aquí, ese era el temor que yo tenía”. Lo que nunca sospecharían es que el poner fin a la relación iba a costarle a todos tan caro. “Esta vez era la definitiva; ella no quería saber nada, ya llevaba  ocho meses sin estar con él ;  lo que quería era terminar su curso  y estar con su hijo y su familia y él eso no lo asimiló; si es que lo dijo, lo dijo, -le interrumpe su marido- “o para mí o para nadie”. 


Con un nieto, y dos hijas más, una de 12 años y otra mayor que Miriam, que trabajaba en Canarias y que ahora está en casa para ayudarles con el pequeño, José, que cobra una pensión por un accidente laboral y vende castañas para que entre más dinero  en casa y Mari lo único que quieren es justicia. “Él está en la cárcel , pero está bien y no está arrepentido. Pero la que ha perdido es mi hija, que es la que no está y la que más falta me hace a mí y a su hijo”.

Con Miriam en la memoria
El Pleno de la Corporación celebra mañana una sesión extraordinaria para aprobar el I Plan de Acción Municipal contra la Violencia de Género. Este mismo día 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, se celebrará la manifestación contra la violencia de Género, con el lema ‘Esta partida la vamos a ganar. Game over’.


La manifestación de la tarde partirá a las 18 horas del Ayuntamiento para finalizar en la Alameda del Banco, donde tendrá lugar la representación de tres sketch a cargo del grupo joven Teatro Estudio Jerez. Al finalizar esta representación se dará lectura a un manifiesto del 25 de Noviembre del Consejo Local de la Mujer. Tras la lectura comenzará un acto simbólico que consistirá en el lanzamiento de 100 globos morados, divididos en cuatro ramilletes de 25 unidades. Cada ramillete llevará el nombre de Miriam.

 

Preocupante descenso de la edad de las víctimas

La diputada socialista Mamen Sánchez ha alertado del aumento de las denuncias por violencia de género presentadas en Jerez “en las que se aprecia cada vez más una disminución de la edad media de las jóvenes. Año tras año, la cifra de denuncias de jóvenes aumenta y cada año la media de edad de las víctimas es menor”. Según denuncia en un comunicado, el importante número de jóvenes que sufren violencia de género pero que no denuncian porque no son conscientes de que la están sufriendo; “son chicas que confunden el romanticismo y los celos con lo que de verdad es un episodio de violencia y chicos que configuran su identidad a partir del dominio y la fuerza”.
A estas circunstancias, añade además las dificultad de llegar a tiempo si las víctimas de la violencia machista no dan el paso.

“El hecho de que no se denuncie hace muy difícil la atención e intervención a la víctima y contribuye a aumentar la gravedad de las situaciones y perpetuar los roles que alimentan la violencia”, añade en el comunicado. Para Sánchez, “detectar  y frenar la violencia de género entre las y los jóvenes tiene una importancia estratégica para combatirla en el futuro a  través de la intervención en casos concretos, pero, sobre todo, mediante políticas decididas en materia de prevención”.


Por ello, la diputada socialista ha anunciado que pedirá al Gobierno que acepte la propuesta del PSOE, que se votará en pleno la semana próxima, para elaborar un plan integral que aborde la violencia de género en la juventud”. Mamen Sánchez insiste en que la mejor forma de luchar contra la violencia de género es desde la educación. Asimismo,insta a  “poner fin a los recortes del Gobierno en materia de igualdad en general y de prevención y lucha contra la violencia de género en particular”, y recuerda que el Ejecutivo ha reducido un 28%, 8,5 millones, el presupuesto en materia de violencia de género y ha denunciado que se está dejando caer la red de protección con el cierre de casas de acogida.

Cruz Roja atiende a  280 mujeres en la provincia

El Servicio de Atención y Protección (ATENPRO), que presta Cruz Roja Española, tiene actualmente a más de 280 mujeres víctimas de violencia machista en la provincia. Mediante este servicio, las mujeres víctimas de violencia de género reciben un terminal móvil conectado las 24 horas del día, los 365 días del año al centro de atención de Cruz Roja, que aporta su capacidad tecnológica y el apoyo psicosocial de profesionales cualificados. Desde el centro de atención se realizan llamadas periódicas a las usuarias para ver cómo están  y si tienen nuevas necesidades. Ante llamadas de emergencia, efectuadas desde el terminal telefónico, los profesionales en el centro de contacto localizan a la persona de inmediato por GPS.

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