La operación se llevó a cabo el pasado 17 de febrero en el hospital Clínic de Barcelona, según anunció ayer el doctor Antonio Alcaraz, jefe del servicio de urología del centro, quien señaló que la paciente fue dada de alta a los tres días.
Alcaraz explicó que en todo el mundo apenas se han hecho una docena de intervenciones de este tipo, y que esperan utilizar esta técnica en los pacientes más sencillos que en estos momentos se operan con una laparoscopia convencional porque presenta más beneficios para el paciente al no tener riesgo de hemorragias, no dejar cicatrices y reducir el dolor al mínimo.
La intervención duró algo más de dos horas y media, y en la misma se operó también a la mujer de una hernia umbilical.