Empresas e instituciones han creado un consorcio en la Faja Pirítica Ibérica para poner en marcha un gran proyecto de investigación y desarrollo conjunto con el objetivo de crear una nueva tecnología para la obtención de metales de los yacimientos minerales presentes en esta formación geológica.
El proyecto se enmarca dentro de la Iniciativa Europea de las Materias Primas que aspira a asegurar el suministro sostenible de materias primas en el Viejo Continente, según ha informado en un comunicado la empresas Emed Tartessus, participante en el mismo.
Bajo el auspicio de la Comisión Europea, ahora se pone en marcha el programa denominado "European Innovation Partnertships on Raw Materials" para dar apoyo a propuestas de cooperación en innovación en este sentido.
La Faja Pirítica Ibérica se perfila como un activo estratégico para la UE, ya que ocupa una extensión de 250 kilómetros de largo y 50 de ancho y se estima que las reservas en la zona pueden elevarse a 1500 millones de toneladas, sin contar con el altísimo potencial de ampliación de en el futuro, según Emed Tartessus.
En concreto, el objetivo del consorcio, señala Emed, sería la puesta en marcha de una planta piloto conjunta, capaz procesar los sulfuros complejos o de baja ley presentes en los distintos depósitos minerales, con lo que se aprovecharían recursos para los que actualmente ningún tratamiento convencional ofrece una solución óptima.
Según el informe de la UE, las nuevas tecnologías pueden ayudar a extraer a mayor profundidad, en zonas más remotas y en condiciones más difíciles.
El programa europeo incluye la realización de diez Acciones Piloto para mejorar la eficiencia del sector extractivo y la aplicación de nuevas tecnologías para el beneficio de mineral.
Lo que se pretende es que la propuesta de la Faja Pirítica, que en esta fase inicial lidera la empresa Cobre las Cruces, se convierta en una de estas acciones.