La Unión Europea (UE) ha pedido a Israel que dé marcha atrás a las nuevas construcciones de asentamientos judíos en Cisjordania, por ser ilegales y suponer un obstáculo para la paz.
"Los anuncios de nuevos concursos para asentamientos, si se llevan a cabo, dañarán aún más la viabilidad de la solución de dos Estados", se indica en un comunicado del servicio europeo de acción exterior.
Para la UE, esas construcciones son "ilegales desde el punto de vista del derecho internacional y constituyen un obstáculo a la paz".
Por ello, los Veintiocho opinan que "Israel debería dar marcha atrás en estas decisiones, poniendo fin a la expansión de los asentamientos".
De lo contrario, se corre el riesgo de "inflamar la ya muy tensa situación sobre el terreno", se añade en la nota.
"Todas las partes necesitan ejercitar la máxima contención y evitar tomar ninguna decisión que pudiera exacerbar las tensiones", concluye.
Según las organizaciones israelíes que supervisan la actividad colonizadora de Israel "Terrestrial Jerusalem" o "Shalom Ajshav" (Paz Ahora), el Ejecutivo sacó el viernes a concurso público la construcción de 430 nuevas viviendas en asentamientos judíos en el territorio ocupado de Cisjordania, una medida que originó duras críticas por parte de dirigentes palestinos.
Israel negó que haya autorizado la construcción de nuevas viviendas en asentamientos de Cisjordania y precisó que se trata de la "mera renovación automática del procedimiento" para la edificación de casas "autorizadas hace un año, conocida por todas las partes".
