El verano en Cádiz ha comenzado hoy con la quema de los juanillos. Unos ninots puramente gaditanos que hacen las delicias de niños y mayores cada año en la tarde-noche del 23 de mayo. Este año han sido 14 los participantes en esta tradicional cita, con cierto aire a ritual, en la que se pretende dejar atrás lo pasado y quemar todo aquello que se quiera olvidar a partir de ese momento.
La jornada arrancó a las 18.30 horas con el de la AVV María Auxiliadora, en la plaza de los Cantes de Cádiz, y continuó, cada media hora, por el de la AVV Tacita de Planta (calle Bulería); el de la AVV Fuerte de San Lorenzo y el de la asociación Encuentros de Familia (calle Juan Romero); el de la AVV Buenavista (plaza Pablo Iglesias); el de la asociación de cargadores Sebastián Pérez (plaza de la Catedral). Quedán aún el del Club Social de Empleados Municipales (plaza Guerra Jiménez); el de la AVV Murallas de San Carlos (plaza de España); el del de la AVV El Carmen (plaza del Falla); el de la AVV Gades La Viña (plaza Capuchinos); y ya a las 23.30 horas en la plaza de la Reina, se quemarán los juanillos de la asociación Mujeres de Acero, de la Federación de Peñas y Entidades Caleteras, y el del Centro de Día La Caleta. Fuera de concurso participa también un juanillo-reivindicativo preparado por trabajadores del 061 y 112 Andalucía, que se ubicará en la Muralla de San Carlos, y que se quemó a las 22 horas. Con este acto de protesta tan original se pretende denunciar “las pésimas condiciones de trabajo y la persecución” a la que se ven sometidos los trabajadores de la empresa concesionaria de estos servicios telefónicos.
El tema estrella de estos juanillos está siendo, como era de esperar, la salida de Teófila Martínez de la Alcaldía y la entrada de Kichi. El duelo entre la política de pelo rubio y el de la mochila al hombro se está sirviendo en los barrios. A ver quién prende antes de los dos.
