El abogado Joan Laporta, aspirante a la presidencia del FC Barcelona, ha asegurado que cuando abandonó el club en el 2010 dejó un contrato con una publicidad indirecta por 20 millones para mantener a Unicef, y que tiene previsto si es elegido presidente el 18 de julio alcanzar un acuerdo por 35 millones de euros.
En una conferencia en el colegio de economistas de Cataluña, Laporta ha vuelto a defender que él no seguirá con el patrocinio de Catar y que se marca como desafío devolver la marca Unicef la parte anterior de la camiseta azulgrana, que ahora se encuentra en la posterior y debajo del número.
Laporta considera que el Barça sólo tiene que vender la camiseta para publicidad y reservarse otros activos para explotarlos, no como considera que sucede ahora "con Catar por todas partes y con un contrato bajo".
El aspirante a la presidencia defiende que una marca "quiera posicionarse con nosotros y quiera unirse a un relato, a una historia bonita en que van de la mano el Barça y Unicef".
Ante ello, está convencido de que una empresa se unirá al club azulgrana para permitir que, con una inversión de 35 millones de euros, Unicef "regrese a la parte frontal de la camiseta".
Acerca de la negociación con la empresa proveedora de material, Laporta ha explicado que él dejó "un buen contrato con la renovación de Nike en el 2009 hasta el 2016, pero en el 2011 la nueva junta lo amplió dos años más, y se ha demostrado que ha quedado fuera de mercado, por los que están firmando otros clubes".
"Renegociaremos el contrato. Hay muchas empresas interesadas en entrar en el fútbol. A los aspirantes, los haremos competir, porque nuestro contrato ahora está muy bajo y debería estar agotado si no lo hubiesen renegociado Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu. Estamos muy contentos con Nike, pero seguro que también querrán acercarse Under Armour, Puma y Adidas", ha explicado.
Acerca de su apuesta por Joan Oliver como director general del Barcelona, Laporta ha argumentado que es el mejor, y lejos de repensarse su apuesta después de Josep Maria Bartomeu le haya recordado que el exejecutivo está imputado, ha subrayado que el actual expresidente "no sólo está imputado, sino acusado por corrupción. Y a él le acusa la fiscalía, no como a Joan Oliver, que es el Barcelona el que persigue a sus socios".
De Oliver, Laporta ha recordado que es uno de los mejores especialistas en España de derechos de televisión, y que cuando negociaba en la Liga "me lo querían fichar".
Finalmente, Laporta ha rememorado que bajo su mandado (2003-10), el Barcelona debió hacerse cargo de la sentencia de las actas de Hacienda que se levantaron con Josep Lluís Núñez.
"Y ahora, quizá, nos toque pagar los excesos de la anterior junta con el fichaje de Neymar, un jugador que nos encanta, pero que por una serie de mentiras acabaremos pagando más de 100 millones d euros, por una mala gestión", ha dicho.
