La Policía Nacional ha detenido a dos hombres en Jerez como presuntos autores de múltiples estafas a través de Internet con la venta fraudulenta de videoconsolas y videojuegos, estimándose en más de 60 la cifra de afectados en todo el país.
Según detalla el Cuerpo Nacional de Policía en un comunicado, los ahora detenidos ofertaban productos electrónicos, concretamente videoconsolas y videojuegos de última generación, que anunciaban por un precio más barato al de mercado, urdiendo un plan para conseguir convencer a los interesados para que adelantasen el dinero vía transferencia bancaria antes de recibir el producto en sus domicilios. Así, los arrestados supuestamente recibían el dinero y el comprador no recibía el producto.
Las investigaciones se iniciaron a raíz de la recepción de varias denuncias por la comisión de este tipo de estafas en varios puntos de España. Una vez iniciadas las pesquisas, los primeros indicios hallados apuntaban a que los autores podrían estar actuando desde la ciudad gaditana de o desde su zona de influencia.
Gracias a los testimonios de los perjudicados y a las indagaciones desarrolladas por los agentes, se comprobó que el método de engaño tenía siempre la misma tipología. Insertaban anuncios en páginas especializadas en la compra venta de objetos de segunda mano, en los que ofertaban videoconsolas a un precio sensiblemente más bajo al de mercado.
Previamente, habrían dado de alta una línea de teléfono prepago, que les servía para comunicarse con el posible comprador, una distinta para cada uno de los anuncios que insertaban en la red.
Cuando un interesado se ponía en contacto con ellos le atendían telefónicamente y después le enviaban fotografías del producto, e incluso videos en los que mostraban documentos nacionales de identidad indicando que eran los suyos, siendo en la mayoría de las ocasiones de terceras personas ajenas al delito, todo ello con la intención de convencer a las víctimas para que accedieran a enviar el dinero por adelantado.
Los investigadores han conseguido registrar y acreditar más de 60 transferencias bancarias dirigidas a los detenidos con un importe total que supera los 12.000 euros, a los que hay que sumar el montante de las operaciones realizadas mediante giros postales, aun no cuantificado.
También se considera que la cifra de afectados podría ser superior, teniendo en cuenta que muchos de los afectados por este tipo de estafas no denuncian los hechos.