A la espera de la reunión que mantendrán este miércoles nuevamente representantes del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de El Puerto con la Junta de Andalucía, el Banco Europeo de Inversiones y la empresa GED Capital, una de las impulsoras del proyecto de los aparcamientos subterráneos y tal y como ya se dejó traslucir el pasado jueves, el fin parece cada vez más cercano y claro.
La confirmación oficial parece ser ya cuestión de horas o de días de que los aparcamientos subterráneos tanto de Pozos Dulces como de los de la Plaza de Toros saldrán adelante y finalmente deberán construirse sin más remisión, a pesar del rechazo encontrado por los que hoy gobiernan la ciudad.
La oposición pasada en el hoy equipo de Gobierno ha sido sin duda alguna una de las bazas y uno de los pilares fundamentales de los que se han opuesto a su realización, a pesar del conocimiento de las millonarias cuantías que resultaría su marcha atrás y la renuncia de estos.
Cuestión ya anunciada, reconocida y aceptada tanto por los que se han mostrado a favor como los que no. Uno de los que no han esperado a la oficialización y comienza a mover ficha ha sido Levantemos El Puerto, uno de los socios de gobierno junto a PSOE e Izquierda Unida y que ha convocado para mañana jueves a partir de las 19.30 horas en el Centro Cívico Augusto Tolón a sus simpatizantes con varios puntos en el orden del día.
Así, el primer punto es “la postura y acciones a realizar por Levantemos ante el negocio ruinoso para la ciudad de los nuevos parkings”, dando ya casi por sentado que la cuestión ya no ronda en cómo acabará la problemática, dada casi por segura a que se construirán, sino qué medidas se van a tomar, toda vez se notifique y se acepte que no hay vuelta atrás en el proyecto y que todo es cuestión de cómo encajar la realidad y de cómo se va a lidiar el escenario que comenzará a tornarse con el paso del tiempo.
Lo cierto es que la formación, liderada por José Antonio Oliva, ha recibido tanto en privado como en público el rechazo unánime de Podemos El Puerto, partido que sin presentarse a las elecciones locales, sí pidió el voto de los suyos para Levantemos y que se mostrado contrario sí o sí a la construcción de ambos parkings.
Sea como fuera, la tesitura y la encrucijada de unos y otros es cuanto menos complicada y de difícil final.
La postura mantenida por estos ha sido intrasigente, resultando la primera prueba de fuego para un tripartito que deberá gestionar tanto su construccion como su paralización.
