Ismael González Martín, archiconocido pinchadiscos, cumple una década al frente de El legado de Gracita Morales, unos de los programas musicales sevillanos más longevos y seguidos por el público. Para celebrar esta efemérides el “Doctor Música”, como se le conoce en mundillo musical, ha organizado una gran fiesta de aniversario en Funclub el 5 de mayo. El Dr. Música visitó Viva Sevilla.
¿Por qué ese nombre?
–Buscaba un icono pop, soy mas popero que heavy… (risas), entonces pensé en un nombre impactante, que no dejara indiferente a nadie y que hiciera preguntarse a la gente “¿Esto qué es?”. Gracita Morales, aparte de un icono, es un personaje muy reconocible, sobre todo para los que ya no somos unos jovencitos…
10 años de El Legado de Gracita Morales. ¿Cómo fueron los inicios del programa?
–Fueron curiosos, la verdad. Yo era Dj y los que iniciaron la aventura de Radiópolis me ofrecieron hacer un programa musical en la emisora y acepté. Al principio era un programa sin entrevistas en el que pinchaba temas que no sonaban en radios comerciales, sobre todo caras B de discos españoles que nadie pinchaba, pero que yo tenía en mi amplia discoteca. Más adelante y casi por casualidad empecé a entrevistar a grupos noveles sevillanos. La cosa funcionó muy bien y así fue cambiando la estructura del programa hasta lo que es hoy. El Legado es una ventana abierta para grupos sevillanos que no tienen opción de acceder a las radios comerciales y a las televisiones.
Bajo tu punto de vista, ¿cómo está el panorama musical en Sevilla en esta década?
–Antes de empezar con el programa yo desconocía la maquinaria que mueve a la música en Sevilla. Ahora sí la conozco. En cuanto a los grupos noveles el panorama no es muy bueno, y no porque no existan grupos buenísimos. Se da la circunstancia de que las salas, en su gran mayoría, cobran por usar sus escenarios, algo en cierto modo lógico, y por eso que estos grupos, con pocas opciones económicas, lo pasan mal. Sí que son llamados para conciertos gratuitos en grandes superficies en los que no cobran, y después no los llaman para festivales en los que sí cobran los grupos. En Sevilla hay una gran cantera de músicos y grupos, pero no están apoyados ni por el público ni por las instituciones. La gente paga por ir a un concierto de tributo pero no lo hace para ver un nuevo grupo de la ciudad. Alguien me dijo una vez que me crearía enemigos diciendo estas cosas pero, sinceramente, creo que es la realidad y por eso lo digo.
Gran fiesta el 5 de mayo para celebrar este cumpleaños. ¿En qué consistirá?
–Comenzaremos al mediodía con una gran caracolada en la Taberna de Corto Maltés, luego conciertos y fiesta en Funclub. Toda la recaudación será para los músicos, la fotógrafa y el técnico de sonido. Estarán bandas como Amphetamine Discharge, Beggar’s House, Jambalayaband y My Yellowstone. Eso es muy fácil (risas). Sin duda el pop de los ochenta. Ahora está el electroswing y el funk de los 70, muy discotequero, adaptado a las nuevas tecnologías y estilos, pero el pop ochentero nunca falla (más risas).
¿Qué mensaje le enviarías a los sevillanos?
–Que escuchen más emisoras sociales y se dejen de tanta radio fórmula, hay muy buena música en Sevilla y en este tipo de emisoras y programas pueden disfrutarlos. Y que se impregnen e involucren en los problemas sociales que tenemos, que son muchos.