La Policía Local de Málaga, a través del Grupo de Investigación y Protección (GIP), ha detectado cuatro establecimientos que permitían el consumo de alcohol o de tabaco en cachimba a menores de edad, destacando un caso donde uno de los consumidores sólo tenía ocho años, siendo trasladado a su domicilio y entregado a su madre.
La Policía Local está llevando a cabo desde inicios del mes de abril una campaña en la que se está incrementando el control en torno a establecimientos y actividades de ocio frecuentados por menores de edad, con el fin de evitar y sancionar comportamientos que podrían ser nocivos para este colectivo especialmente vulnerable.
Entre otras actuaciones, sobre las 00.40 horas del sábado al domingo 7 de abril, agentes del GIP detectaron a un nutrido grupo de menores dentro de un establecimiento en la avenida Isaac Peral, pudiendo comprobar cómo se les permitía el consumo de bebidas alcohólicas. En concreto, se trataba de dos jóvenes, de 16 y 17 años, que tomaban combinados con alta graduación alcohólica, así como otros cinco menores, de 11 a 14 años, que se encontraban fumando cachimbas sin nicotina.
Siguiendo esta línea de trabajo, sobre las 22.00 horas del viernes 12 de abril, policías locales del GIP acudieron a un local en la zona de Carretera de Cádiz dedicado a la organización de fiestas y eventos, localizando en su interior a un grupo de 15 jóvenes, de entre 15 y 17 años, que estaban fumando en cachimbas y bebiendo combinados con alcohol.
En este sentido, según han indicado desde la Policía Local, al identificar a la persona a cargo del local, pudieron comprobar que se trataba de un particular, mayor de edad, que lo había alquilado para la celebración de esta fiesta.
Ese mismo día, sobre las 22.30 horas, agentes del GIP llevaron a cabo una inspección en otro establecimiento de la zona de avenida Carlos Haya, sobre el que se habían recabado informaciones previas y en el cual localizaron a un total de siete menores de entre 13 y 15 años de consumiendo en cachimbas, dándose la circunstancia de que entre ellos había uno más pequeño, de sólo ocho años, que estaba tomando estos productos.
Ante esta inusual situación, los policías locales lo acompañaron hasta su domicilio, donde quedó a cargo de su madre, la cual fue informada de que se daría comunicación de estas circunstancias a los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Málaga.
Finalmente, dentro del operativo citado, sobre la 01.00 horas del domingo 21 de abril, se detectó la presencia en un establecimiento situado en calle Horacio Lengo de cinco menores con una media de 15 años que se encontraban igualmente fumando en cachimbas.
Siguiendo el protocolo establecido para estos casos, en todos los supuestos anteriores, los policías locales dieron conocimiento a los padres de los menores implicados y, en aplicación de la legislación vigente, levantaron las correspondientes actas de denuncia a los responsables de los establecimientos y a los organizadores de dichas actividades.
La Policía Local recuerda que este tipo de acciones conllevan importantes sanciones administrativas para los establecimientos y organizadores, que pueden oscilar desde una elevada suma de dinero hasta el cierre cautelar del local, incidiendo en que este tipo de actividades pueden poner en riesgo la salud de los menores.
En concreto, respecto a las denominadas cachimbas, los agentes han subrayado que pese a no contener nicotina, el hecho de permitir su consumo a menores está prohibido y, además, tal y como indican fuentes médicas especializadas, podría resultar perjudicial para la salud, por lo que se aconseja a los padres que controlen el uso de tales productos por parte de sus hijos menores de edad.