Un equipo internacional de investigadores, con importante participación española, ha descubierto un mecanismo preventivo que evita que el sistema inmunológico ataque a las células del hígado durante la regeneración hepática y favorece la regeneración de ese órgano tras el trasplante procedente de una persona viva.
En la investigación, en la que han intervenido investigadores de varios centros de España, Reino Unido, Australia y Japón, ha participado el doctor Manuel Alejandro Fernández Rojo, líder del grupo de Medicina Regenerativa Hepática en el Instituto IMDEA Alimentación de Madrid.
Los resultados de esta investigación, que se ha prolongado durante trece años, se han publicado en la revista Hepatology.
El Instituto Madrileño de Estudios Avanzados (IMDA) Alimentación ha recordado hoy en una nota de prensa que el trasplante de hígado es la principal opción terapéutica de las enfermedades hepáticas crónicas y el cáncer de hígado.
Sin embargo, la escasez de órganos donantes constituye un grave problema debido a la alta demanda de este tipo de trasplantes, por lo que en las últimas décadas el avance de la medicina regenerativa y el mejor conocimiento de su aplicación clínica ha conducido al desarrollo de trasplantes de hígado de donante vivo como una alternativa a los trasplantes de donantes fallecidos.
En este contexto, el IMDEA Alimentación ha observado que uno de los ámbitos de la investigación fundamentales que se está desarrollando como alternativa es la medicina regenerativa y su aplicación en la práctica clínica para mejorar la terapia de este tipo de pacientes.
El hígado es el único órgano con la capacidad de regenerarse en respuesta al daño o a la perdida de tejido como consecuencia de la acción de compuestos químicos o cirugía.
El estudio de los procesos moleculares que rigen el proceso de regeneración hepática ha sido clave para que los investigadores y hepatólogos aprovechen la capacidad regenerativa del hígado y desarrollen técnicas de trasplante de hígado de donante vivo.
Estos trasplantes permiten, por ejemplo, que recién nacidos con enfermedades hepáticas puedan obtener un fragmento de hígado de sus progenitores o parientes cercanos y seguir creciendo con un hígado totalmente funcional.
El funcionamiento correcto del cuerpo depende de la actividad hormonal y su equilibrio está directamente relacionado con los hábitos alimenticios; si la dieta es deficiente en determinados aminoácidos, ácidos grasos o carbohidratos el cuerpo lo refleja de muchas maneras incluida una desregulación funcional de las hormonas.
Durante el proceso de regeneración hepática, la hormona del crecimiento juega un papel importante, pero los estudios que se habían realizado hasta ahora no aclaraban los mecanismos moleculares que estaban involucrados.
Ahora, este equipo multidisciplinar de investigadores ha descubierto que la deficiencia total de la acción de la hormona del crecimiento provocaba un ataque de las células inmunes sobre las células del hígado en regeneración.
Para ello, practicaron una "hepatectomía parcial" (la escisión quirúrgica de un 70 por ciento del hígado) en modelos experimentales de ratones, modificados genéticamente para que su hormona del crecimiento fuera deficiente, y comprobaron que el hígado regenera en una semana en condiciones normales.
Descubrieron en ese proceso que, en la regeneración hepática, una proteína (la H2-Bl, denominada HLA-G en humanos) juega un papel crítico impidiendo el ataque del sistema inmunitario y asegurando la supervivencia de los ratones y la regeneración del hígado.
Estos estudios, y las futuras investigaciones sobre los procesos moleculares involucrados en la regeneración hepática, serán esenciales para incrementar la aplicación de trasplantes de hígado de donante vivo en los próximos años, ha destacado el mismo centro de investigación.