El Gobierno quiere sacar adelante los presupuestos de 2021 con Vox. “Se está negociando con todas las fuerzas políticas pero principalmente con nuestro socio parlamentario Vox”, ha dicho el portavoz del Ejecutivo, Elías Bendodo. De esta manera, el PP andaluz se desmarca del polémico comentario de su líder nacional, Pablo Casado, a Vox: “Hasta aquí hemos llegado”.
El portavoz de Vox en Andalucía, Alejandro Hernández, reconoció días atrás el enfriamiento de las relaciones entre su formación y el PP como consecuencia de las palabras de Casado. Desde entonces, todavía no ha tenido lugar ningún encuentro entre la Consejería de Hacienda y Vox y “de momento no hay ninguna fecha acordada”, aseguran desde la formación encabezada por Santiago Abascal.
Aún así, el PP andaluz piropea a su “socio” para que apoyen “los presupuestos más importantes de la legislatura” y conseguir que Andalucía sea una de las primeras comunidades en tener aprobadas sus cuentas “en tiempo y forma”, según Bendodo.
Además, la próxima semana irá al Consejo de Gobierno el proyecto de presupuestos para su aprobación. A partir de ahí, Hacienda seguirá negociando con los partidos políticos para alcanzar acuerdos previos antes de su votación en sede parlamentaria.
Y es que “Vox entenderá que estas cuentas son necesarias para luchar contra la Covid”, ha indicado Bendodo. Los otros dos presupuestos aprobados por el Ejecutivo andaluz en 2019 y 2020 contaron con el respaldo de Vox.
El guiño del PP a Vox ha sentado mal en el PSOE, que no tardó en quejarse. El diputado Antonio Ramírez de Arellano, que suele llevar el peso de las negociaciones de los presupuestos en su partido, ha criticado, a través de Twitter, que “negociar principalmente con Vox y esperar aportaciones de los demás es sinónimo de presupuesto con Vox y esperar que el resto se sumen al trágala”.
Por otro lado, respecto a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) planteados por el Gobierno de España, la Junta ha reivindicado el “modelo” del Ejecutivo de PP y Ciudadanos de “bajada de impuestos” como fórmula para “recaudar más”, y lo ha contrapuesto con las “recetas antiguas” que, a su juicio, abandera el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos.
