Socialistas y populares se enfrascan en una guerra de acusaciones mutuas sobre lo que debieron hacer y no hicieron y lo que pregonan en Cádiz y votan en el Senado.
El presunto autor ocultó el cadáver en el maletero del taxi y se puso al volante del mismo hasta que le dieron el alto en un control de la Guardia Civil en Conil.