Los restos mortales del futbolista José Antonio Reyes han sido incinerados tras el entierro multitudinario en la iglesia de Santa María de Utrera (Sevilla)
El futbolista de 35 años perdió la vida en la carretera en su ciudad natal, Utrera. También un primo de 23 años ha fallecido y otro se encuentra muy grave
El futbolista, fallecido el sábado en un accidente en el que también murió su primo, circulaba a más de 220 kilómetros por hora, según la Guardia Civil