El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Almería, Juan Carlos Pérez Navas, ha pedido al alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, que no trate de "hacer negocio" con la situación "dramática" que viven los regantes de la Vega de Almería y el Bajo Andarax y ha reclamado al Consistorio que, como propietario de la desaladora, "les ceda el agua al precio resultante de aplicar sólo los costes de producción, de manera que no necesiten tener que solicitar ninguna subvención que, además, sería ilegal, dado que las directivas comunitarias prohíben rotundamente subvencionar la producción de agua".
"Ayer oíamos al alcalde pedir a la Junta de Andalucía que subvencionara ese agua porque, según él iba a ser muy cara, y desde el PSOE le decimos que es inviable jurídicamente porque lo prohíben las directrices europeas", ha asegurado en rueda de prensa.
Según Pérez Navas, el propietario de la desaladora es el Ayuntamiento de Almería y, por tanto, "es el alcalde el que va a poner el precio del agua", así que, según ha remarcado, "antes que obligar a los agricultores a pedir una subvención por un sobrecoste elevado, debería darles el agua al precio de lo que realmente se gasta en producirla".
"Sencillamente queremos que el Ayuntamiento no aproveche esta situación para hacer caja con el coste del agua para los agricultores que se encuentran en un momento de necesidad y de emergencia extrema", ha añadido.
En este sentido, el portavoz socialista ha propuesto al equipo de gobierno del PP "que les venda el agua temporalmente a lo que cueste producirla, sin obtener beneficio" ya que los agricultores estiman que a 0,50 céntimos el metro cúbico sería "el precio ideal, no el 0,60 ni el 0,62 que les está pidiendo el Ayuntamiento".
"Es el momento de que el Ayuntamiento se lo plantee como un servicio público hacia esa agricultura que tanto da a la ciudad en PIB, en riqueza, en promoción y en puestos de trabajo, que se lo devuelva de forma temporal, sin aprovecharse de esta situación, cobrando exactamente los costes eléctricos para que, por otro lado, tampoco tengan que pagarlo el resto de ciudadanos", ha indicado.
Con respecto al plazo mínimo de suministro de agua para el riego procedente de la desaladora, que según el PP no puede ser inferior a un año ni superior a dos, Pérez Navas ha recordado que las condiciones que se aplicaron a la empresa Abengoa como concesionaria de la explotación fueron fijadas por el propio Ayuntamiento, se aprobaron en Junta de Gobierno del 4 de octubre de 2013, y por tanto, de igual forma el Consistorio podría ahora renegociarlas.
No obstante, ha considerado que no será necesario "porque todo indica que antes de dos años la situación se habrá resuelto y podrán volver a regar con aguas regeneradas de la depuradora".
TARDE Y MAL
Por otro lado, Pérez Navas ha criticado "la lentitud" con la que se está llevando a cabo el proceso por parte del equipo de gobierno del PP y ha desvelado que la primera petición formulada por los regantes al Ayuntamiento tiene fecha del 12 de mayo. "El 24 de mayo vuelven a pedir al Consistorio una solución y no han obtenido respuesta hasta ayer que hubo, en teoría, una reunión con el concejal que, además, se ha pospuesto para celebrarla con los técnicos mañana", ha lamenatdo.
Igualmente, ha indicado que la Junta solicitó información al Ayuntamiento, que contestó el 28 de junio, "mes y pico después, diciendo que podría darles 21.000 metros cúbicos todos los días, el equivalente a tres bastidores de la desaladora que están en desuso".
"Por lo tanto, cuando se habla de agilidad, el primero que tendría que aplicársela es el propio Ayuntamimento, pues ha contestado a la petición de auxilio de los agricultores pasados ya prácticamente dos meses desde que plantearon esta alternativa del agua desalada para salvar las cosechas", ha señalado.
"MISTERIOSAS OBRAS"
Por otro lado, el portavoz municipal del PSOE se ha referido a unas obras, supuestamente para regadío de esta zona agrícola, cuyos responsables se desconocen y que han despertado la indignación entre los regantes.
"Sería grave que se estuvieran haciendo unas obras sin permiso municipal que, si verdaderamente son de regadío, sólo correspondería ejecutar a los propios agricultores, que son los propietarios de las concesiones de agua de riego", ha afirmado para señalar que "si los propios regantes ejecutaran por su cuenta dichas obras, con todas las garantías de legalidad, podrían solicitar ayudas a la Unión Europea y otros organismos, lo que abarataría los costes de la distribución del agua, algo que no podría hacerse si las obras las lleva a cabo cualquier otro colectivo, empresa u organización".
Al hilo de esto, ha remarcado que la desaladora de Almería tiene una capacidad de producción de 20 hectómetros cúbicos al año y "sólo funciona al 20% de su capacidad", por lo que, a su juicio, "tenemos margen suficiente, sin tener que hipotecar el consumo humano, para, ante una situación excepcional, dar agua a los regantes de una forma temporal".
"Los agricultores sólo necesitan que se aumente la producción con la puesta en marcha de dos bastidores de la desaladora, es decir, 14.000 metros cúbicos, dado que cada bastidor produce 7.000 metros cúbicos al día", ha concluido.