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Arcos planta cara a las palomas para proteger el patrimonio histórico

A partir de septiembre se realizarán capturas selectivas en los principales edificios donde anidan y se practicarán vuelos disuasorios con aves rapaces

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  • En más de una ocasión se han extraído decenas de sacos de excrementos. -

De todo Arcos es conocida la importante colonia de palomas sobre algunos de los principales  monumentos, caso de la Basílica Menor de Santa María de la Asunción o de la antigua iglesia de San Miguel. Este hecho provoca un grave daño al patrimonio debido sobre todo a los excrementos de las aves y un riesgo de enfermedades animales, señala el delegado de Patrimonio, Andrés Camarena.

En este contexto, el Ayuntamiento anuncia tareas  para  acabar con estas colonias “que tanto afectan a los edificios de la ciudad y molesta a los visitantes y vecinos”. “Los excrementos de las palomas son muy corrosivos porque contienen ácidos úrico y fosfórico, lo que produce una gran corrosión y manchas en las superficies de los edificios, además de la oxidación de los elementos metálicos. También las heces producen la obstrucción de canaletas y desagües con el consiguiente gasto que supone su desatranque”.

Tras mantener conversaciones con el delegado territorial  de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Óscar Curtido, y con su equipo técnico, así como con el presidente de AMA Natura, Ángel Roldán, se ha decidido contratar a una empresa que a partir de septiembre hará capturas con jaulas selectivas en los puntos identificados de mayor efectividad. Periódicamente, un técnico especialista revisará los capturaderos, llevando a cabo el cebado de las jaulas con agua y alimento, y se retirarán las aves capturadas de acuerdo a la normativa de bienestar animal.

Además, según apunta Camarena,  se harán vuelos disuasorios con aves rapaces  y se abrirá una línea de atención al ciudadano para estudiar las quejas que las palomas causen.  

Explica el edil que durante los últimos años se han multiplicado de forma exponencial estas aves y que no se puede esperar más a controlar la gran población de palomas y los problemas que acarrean. El delegado opina que “debemos mantener nuestro patrimonio para legarlo en las mejores condiciones a las generaciones venideras  y para que todo aquel que visite Arcos se lleve la mejor impresión posible de nuestra riqueza monumental”.

eA

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