Tras el día de Reyes se cierra el periplo de las compras navideñas, antes de ceder el turno a las rebajas. En la vorágine de esos días de fiesta se efectúan infinidad de compras de regalos y comida para las celebraciones. Pero no solo es época de compras, también lo es de hurtos.
Los comercios son los principales damnificados por estos robos, ya que el 35% de los mismos se producen en establecimientos minoristas (retailers), según indica la empresa Checkpoint en una nota de prensa, en la que señala estas fiestas como la época más crítica en lo que a pérdida desconocida se refiere.
En dicha nota, recogida por Newsline, la pérdida desconocida supone el 0,74% del total de la facturación anual de las empresas de distribución en España.
Según revelan el Barómetro del Hurto, el 55% de los mismos son acometidos por bandas organizadas que aprovechan estas fechas para maximizar sus beneficios hurtando en diferentes establecimientos productos de alto valor para revenderlos después en mercados paralelos.
El barómetro señala que dos de cada tres hurtos (en concreto, el 64%) son realizados por autores multirreincidentes que efectúan tres o más al año en los establecimientos. También define el perfil más habitual de los autores de los hurtos: cerca de la mitad de los ladrones, un 44% de ellos, tiene menos de 30 años.
Otro dato significativo es que la mitad de los minoristas ha apreciado un notable incremento de la agresividad verbal o física de los infractores hacia el personal de tienda y de seguridad.
Lo más robado
Tal y como explican los especialistas de Checkpoint Systems, los perfumes y el maquillaje son los artículos más susceptibles de ser hurtados durante las Navidades. Lo son por su pequeño tamaño y su elevado coste, por lo que estos cosméticos poseen unas características que los convierten en blancos predilectos para los delincuentes.
En el ámbito de la alimentación los hurtos más relevantes son los de vinos y licores, que ocupan el segundo lugar del ranking. Los festejos de fin de año conllevan un incremento del consumo de alcohol y, cómo no, en su hurto. Los principales damnificados son los supermercados y grandes almacenes.
También es en estos establecimientos donde más se sustrae otro producto que es de los más recurrentes para esta práctica durante todo el año: los embutidos, tercer producto de este ranking, aunque con menos estacionalidad.
Un clásico en estas fiestas tanto para las compras como para los hurtos son los productos electrónicos, como videojuegos y teléfonos móviles. Su elevada demanda facilita su reventa, el gran objetivo de las bandas organizadas.
El top 5 de esta clasificación lo cierran los juguetes. Es otro de los productos estrella de estas fechas, tanto para los compradores como para aquellos que delinquen.
Por último, no nos podemos olvidar de los juguetes, que en esta época del año también tienen un puesto privilegiado al inundar los salones de gran parte de los hogares españoles.
Dentro de la categoría de moda y complementos, y muy cerca de formar parte de este top 5, destaca el calzado como otro de los objetos más elegidos para el hurto.
