Según este colectivo, los vecinos de la zona han alertado de un incremento del consumo y venta de sustancias estupefacientes, así como de la existencia de grupos de jóvenes que no respetan las normas más elementales de convivencia.
De igual modo, denuncian el frecuente incumplimiento de las ordenanzas que afectan a la limpieza viaria, la circulación o la tenencia de animales. Estos hechos, que la asociación reconoce “no son nuevos”, se están incrementando “considerablemente” desde que “los responsables” de las distintas fuerzas de seguridad “han dado la orden” de que la mayoría de los efectivos “permanezcan en los lugares en los que se encuentran los trabajadores” que están padeciendo los distintos conflictos laborales motivados por los impagos municipales.
A la asociación Bellos Horizontes le parece “lamentable” y “sin sentido” que los barrios estén “totalmente desprotegidos” como consecuencia de este abandono.
El colectivo ha remitido un escrito a la alcaldesa en el que le solicita la adopción de las medidas “necesarias y oportunas” para garantizar la presencia en los barrios de las fuerzas de seguridad. En concreto, Bellos Horizontes pide a García-Pelayo que traslade esta queja al comisario del Cuerpo Nacional de Policía, de manera que las barriadas disfruten “de las garantías necesarias de seguridad para vivir en una clima de convivencia social digna”.
