Todos recorrieron el sendero de aproximadamente 3 kilómetros que rodea la Laguna
El objetivo de la salida era profundizar en el conocimiento de las inmediaciones de la Laguna portileña, a través de distintas actividades de convivencia relacionadas con la protección del medio. Conocer las inmediaciones de este entorno natural y sus posibilidades, tanto medioambientales como turísticas fueron ejes de una jornada en la que se dieron la mano, por otra parte, los vecinos de mayor edad con los niños de El Portil y Nuevo Portil.
Así, mayores y pequeños disfrutaron de cerca de la riqueza de este paraje, con iniciativas como la colocación de casas-nido en los pinos, o el paseo por el sendero que circunda la Laguna de El Portil, por el que los asistentes caminaron colaborando con la limpieza del entorno, aunque no fue necesaria mucha atención en este sentido porque la senda "estaba en perfectas condiciones", según los técnicos medioambientales.
La jornada comenzó en la oficina municipal de la calle Enebro, desde la que el grupo se dirigió al mirador de la Laguna, para continuar más tarde por el carril bici y colocar las casa-nido con la ayuda de un operario municipal.
Los niños y niñas fueron los encargados de subirse a las ramas, como lo hicieron recientemente los alumnos y alumnas de los colegios Enebral, Santo Cristo del Mar, San Sebastián y Virgen del Carmen.
Tras esta parada, recorrieron todos el sendero de aproximadamente 3 km que rodea la Laguna, conociendo las peculiaridades de la zona con el apoyo de los técnicos de Medio Ambiente del Consistorio. Las explicaciones se centraron sobre todo en la flora, con introducciones a la vegetación palustre y las especies del bosque mediterráneo.
Para la concejala delegada de El Portil, Beatriz Román, "es importante que la población conozca la riqueza de la Laguna, para que la respete y se implique en su conservación". El presidente de la asociación vecinal, Francisco López, también se mostró satisfecho por su parte y dijo que la intención era "aprender a conservar el entorno".
