En la visita estuvieron presentes también el vicepresidente de Apemsa, Alfonso Candón, el consejero delegado, Daniel Pérez y el gerente, Juan Campos-Guereta, además del ingeniero encargado de las obras.
Estos trabajos han consistido en la colocación de una nueva conducción de saneamiento, demoliendo la antigua, de manera que, por gravedad, conduzcan las aguas residuales y pluviales hasta los aliviaderos existentes en la calle Cielo, Larga y Pozos Dulces. Se repondrán todas las acometidas de saneamiento existentes, así como los pozos.
Las obras de abastecimiento cosisten en la instalación de una conducción de 100 mm de diámetro de fundición dúctil en sustitución de la existente. Igualmente se repondrán las acometidas y se instalarán los accesorios de corte y distribución necesarios.
Moresco subraya que, en cuanto a la pavimentación de la calle, de acuerdo con el área de Mantenimiento Urbano, se ha definido que las aceras y calzada queden a distinto nivel. La calzada es de tres metros de ancho y el pavimento es de adoquines de granito rústico de color gris. Además, en el ensanchamiento de la calle que queda frente a la iglesia Espíritu Santo se ha elaborado, con los mismos adoquines, un dibujo que representa el escudo del Convento del mismo nombre, una idea del inspector de obras de Apemsa, que ha sido muy agradecido por el mismo.
Las obras continúan en el resto de la calle, que sigue cortada al tráfico.