Al término del Pleno extraordinario de Vivienda, el alcalde de Cádiz ha atendido en la mañana de este miércoles a la gaditana Carmen Ocaña, de 35 años y madre de cuatro hijos menores de edad que se encuentra “desesperada” porque, asegura, debe abandonar la casa de Procasa en la que reside junto a sus pequeños, en la calle Pericón de Cádiz.
La joven ha relatado a VIVA CÁDIZ que esa casa estaba adjudicada a sus abuelos, luego pasó a su madre, y cuando ella fue a subrogarla tras el fallecimiento de su progenitora “me engañaron en Procasa porque yo pensé que estaba firmando la subrogación, pero lo que realmente firmé fue mi conformidad como precarista. Fue una jugarreta y por eso lo denuncié el pasado julio”. Y lo hizo tras recibir ese mes una notificación por parte de Procasa en la que se le instaba a la regularización de la vivienda que, entre otras cosas, supone actualizar el alquiler de 0,81 euros que venía pagando a “más de 200 euros con la comunidad y el IBI repartido entre los doce meses”. Una cantidad que, asegura, no puede abonar mensualmente.
Es por ello que esta mañana ha acudido al Ayuntamiento para hablar con el regidor, quien la ha atendido y se ha comprometido a estudiar su caso, recalcando en todo momento que “cumplirá con lo que marca la ley”, según ha manifestado la propia Carmen Ocaña.
Desde Procasa exponen que, según ese proceso de regularización de la vivienda, el alquiler mensual que debe abonar esta ciudadana es de unos 125 euros. Y asimismo apuntan que la demanda que presentó se basa en “su disconformidad con el proceso de regularización de alquileres que se aprobó en Consejo de Administración de Procasa en noviembre de 2022”. Desde Procasa se ha respondido en este mes de septiembre a su demanda, no constando en la empresa municipal de vivienda “ningún proceso de desahucio ni parecido” en relación a este caso.