Durante los últimos días se viene produciendo una serie de quejas entre la vecindad de El Santiscal relativas al depósito de restos de poda en plena vía pública. Si bien el Ayuntamiento está facilitando este servicio a la barriada al ubicar una gran batea los fines de semana junto al centro comercial, todavía existen personas que depositan este tipo de residuos fuera de la misma, dejando en medio de la calle una gran cantidad de ramas que no pueden ser retiradas por los operarios municipales como parte del servicio diario de recogida de basuras.
Desde hace semanas la Delegación municipal de Medio Ambiente viene advirtiendo de que el depósito ilegal de restos de poda, o de cualquier otro tipo de residuos de forma indebida, puede ser objeto de una sanción económica, pero por lo que se ve no existe miedo y todavía hay incívicos a los que da igual depositar restos de poda donde les dé gana. Esta situación produce de paso una mala imagen de la barriada y particularmente del entorno del centro comercial y del polideportivo de la barriada.
El delegado de Medio Ambiente y primer teniente de Alcalde, Leopoldo Pérez, ha pedido públicamente colaboración a la vecindad “porque a todos nos gusta una ciudad limpia, y la verdad es que a veces deja que desear”. El delegado apunta a “una minoría” y a la dispersión poblacional en decenas de barriadas, pero también a los pocos trabajadores de los que dispone la empresa concesionaria a pesar de sus medios técnicos. Pérez señala que la empresa va más allá porque en ocasiones hace trabajos que no les corresponde. No obstante, asegura que se actuará en determinados errores para mejorar la limpieza pública, para lo que no se descarta la instalación de nuevas papeleras. Sin embargo, a pesar del gran número de contenedores, en muchas ocasiones las bolsas de basura aparecen en el suelo, una situación que “no se puede consentir”, explica el delegado. Esta mala praxis afecta a los distintos residuos, desde orgánica hasta papel y cartón, vidrio y plástico, e incluso a los tapone de botellas. En particular, recuerda la obligación de tratar los residuos inertes o escombros procedentes de las obras domésticas, ya que esos restos aparecen con frecuencia al lado de contenedores e incluso en cunetas. Respecto a los restos de poda, señala que no se puede consentir que aparezcan en plena calle sin que se utilice la batea facilitada por el Ayuntamiento. Pérez rechaza esas conductas, insiste, de una minoría, de ahí que pida más implicación. En este sentido, no descarta campañas entre escolares y la población en general, así como la instalación de cartelería avisando antes de proceder a sancionar, concluía el delegado.