El equipo de Gobierno trasladó a la vecindad del casco antiguo sus intenciones respecto a la plaza del Cabildo, donde se confirma que se llevará a cabo una actuación declarada de emergencia valorada en 200.000 euros para devolver el uso y la normalidad a este enclave del casco antiguo de Arcos. La idea, según el propio alcalde, Miguel Rodríguez, es convertir de nuevo la plaza en transitable, dado que actualmente está literalmente levantada por las obras que quedaron suspendidas a finales el pasado año.
Rodríguez avanzó a los principalmente afectados por esta actuación que en breve se procederá a la firma del convenio para la contratación de los trabajos con una empresa privada. A partir de ahí se terminaría la actuación en un plazo que no ha sido confirmado aún.
Miguel Rodríguez señalaba a la vecindad que su intención fue siempre la de terminar las obras, por lo que nuevamente culpó a la empresa anteriormente concesionaria de la paralización de los trabajos y en este sentido de haber suspendido el contrato de forma unilateral, perjudicando a la zona, al turismo y a los propios vecinos “con su pérdida de identidad”. El alcalde aseguraba haber dado explicaciones desde el principio y defendió nuevamente el papel de la Junta de Andalucía en todo este proceso. De hecho, Rodríguez se hizo acompañar de la dirección facultativa que vendrá ahora a fiscalizar la obra y de la delegada territorial de Fomento, Carmen Sánchez, quien aludía a una situación “sobrevenida” y no deseada por la administración autonómica. Dijo que la empresa anterior ha incumplido el contrato con todo lo que ello significa de cara al patrimonio histórico y para evitar filtraciones a la peña y su emblemático mirador.
Sánchez aseguraba llevar meses trabajando para que “la obra no esté en carne viva”. Paralelamente, la Delegación territorial de Fomento, como “tercera pata” de la actuación, estudiará jurídicamente la situación. Del mismo modo, afirmaba que sus contactos con el Ayuntamiento y su alcalde han sido constantes para desenquistar la situación, “pero todos sabemos que los pasos de la administración no son de un día para otro”, con lo cual justificaba en cierto modo el retraso. “En próximas semanas veremos cómo empieza esa obra de emergencia”, explicaba Carmen Sánchez, quien concluía agradeciendo la paciencia a la población, que se ha visto desprovista de un lugar clave del casco antiguo especialmente durante las fiestas navideñas. Ya en una segunda fase, el Ayuntamiento tiene prevista otra obra de embellecimiento.
Esta reunión se celebró a instancias precisamente de los vecinos.