La presidenta del PP de Sanlúcar y portavoz municipal, Carmen Pérez, ha advertido de que la comunidad educativa del CEIP Maestro José Sabio ha denunciado que sufre una plaga de oruga procesionaria.

Pérez ha expresado su preocupación porque si dicha oruga entra en contacto con la piel puede producir fuertes reacciones alérgicas y urticarias y hasta afecciones bronquiales.

“Está en riesgo la seguridad de los niños y niñas”, ha alertado.

La dirigente popular ha apuntado que la noticia se conoce solo 24 horas después de que numerosos centros hayan denunciado incidencias en el estado de las instalaciones, caso del CEIP El Pino, Quinta de la Paz, Guadalquivir o El Palmar y esté a punto de cumplirse un año con un aula apuntalada en el CEIP Maestra Caridad Ruiz por el desprendimiento de un techo.

Para Pérez, la plaga de oruga procesionaria en el Maestro José Sabio es la gota que colma el vaso de la paciencia de docentes, padres y madres, que se enfrentan solos a los problemas porque el equipo de Gobierno de IU y PSOE están desaparecidos.

Asimismo, la dirigente popular teme que la plaga en este centro no sea un hecho aislado, dado que hay otros colegios en las inmediaciones de pinares, donde esta oruga prolifera, y ha reclamado al Ayuntamiento que actúe con la máxima urgencia.

No obstante, Pérez pide a la alcaldesa que aclare primero si puede hacerlo, dado que ahora mismo, según las informaciones trasladadas al PP por personal municipal, el Ayuntamiento carece de contrato para hacer frente al tratamiento contra la procesionaria.

La portavoz popular recuerda que IU denunció una situación similar cuando estaba en la oposición, con una plaga en el parque de La Jara y fue muy beligerante con el Gobierno de entonces, con Víctor Mora, hoy su socio, en solitario.

Por ello, ha pedido que responda a la denuncia del CEIP Maestro José Sabio con la misma diligencia que reclamaba entonces al Ayuntamiento y extienda el tratamiento al resto de centros que puedan verse afectados, y parques y jardines de la ciudad, para garantizar la seguridad de los más pequeños en colegios y en zonas de esparcimiento, así como el de animales domésticos.

“Es un problema de salud pública serio que la alcaldesa no puede seguir eludiendo”, ha finalizado.