En algunos casos, la espera para poder estar en primera fila había sido de doce horas
Durante los momentos previos al concierto, pudimos hablar con varios grupos de aficionados (principalmente chicas) que dieron fe de su incondicional pasión por Melendi. En algunos casos, la espera para poder estar en primera fila había sido de doce horas. Alguna había acudido ya a las nueve de la mañana. Una joven nos comentó que había hecho expresamente el viaje desde Barcelona para poder estar con su ídolo en el primer concierto que este iba a dar en Andalucía.