Ha saltado a la luz que la titular del juzgado de primera instancia número 21 de Madrid dictaba una orden de embargo por valor de 9,3 millones de euros contra una empresa del exjugador del Real Madrid, Raúl González, al estimar la reclamación de una sociedad a la que estaba asociada en negocio de energías renovables y solar fotovoltaica, cuyo origen estaba en la Bahía, concretamente en Puerto Real a través de la empresa Gadir Solar.
Los abogados de Raúl González han presentado recurso contra la ejecución de la orden judicial, ya que la firma Europa Scar Sport SL, propiedad del exjugador, solicitó su entrada en concurso de acreedores a mediados del pasado junio.
La juez ha concedido tras esto un plazo de cinco días a la citada empresa para que haga entrega el certificado de esta situación y levantar la orden de embargo.
El fallo judicial es consecuencia de la reclamación presentada por la empresa Aurantia con la que Raúl González se asoció en 2008 para adquirir el 20% del capital de una sociedad llamada Cadmos Energías Renovables, en la que los demandantes poseían el 80% del capital restante.
Cadmos, que pretendía poner en marcha en Cádiz un fábrica de paneles solares a través de su filiar Gadir Solar, solicitó al banco Crédit Suisse un crédito de 35 millones de euros que, según Aurantia, todos los socios se comprometieron a devolver. El proyecto no se llevó a cabo y la entidad financiera exigió la cantidad aportada.
Cabe mencionar que Gadir Solar era una filial de Cadmos Energías Renovables, y fue de las pocas empresas que llegaron como solución al problema generado por el cierre de Dephi.
A la inauguración de sus instalaciones en Puerto Real acudieron los por entonces consejeros andaluces de Gobernación, Luis Pizarro; de Empleo, Antonio Fernández; y de Innovación, Ciencia y Empresa, Martín Soler; y el presidente del Grupo Aurantia (al que pertenecía Gadir Solar como filial de Cadmos Energías Renovables), Rafael Naranjo.
Precisamente Aurantia presentó una demanda contra la empresa de Raúl después de que ésta intentara sin éxito que se declarara nulo el acuerdo entre las compañías, y el juzgado resolvió a su favor el 26 de febrero pasado y condenó a Europa Scar Sport a pagar 7.174.361 euros.
Tras la petición de los demandantes de la ejecución provisional de la medida, la juez ha ordenado ahora el pago de esa cantidad, más otra de 2.152.000 en concepto de intereses.
Fracaso empresarial
El proyecto de Gadir Solar fue un fracaso en toda regla que dejó en la calle a 196 trabajadores y un boquete de 25 millones de euros en subvenciones provenientes de la Junta de Andalucía.
Un proyecto que apenas duró tres años y que iba a ser una de las panaceas que paliarían la marcha de la multinacional Delphi de la Bahía de Cádiz.
Tras constarse el fracaso, la Delegación territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía en Cádiz informaba hace unos dos años de que la Junta estaba pendiente del reintegro, por parte de la extinta Gadir Solar, de más de 14.950.000 euros en ayudas concedidas y cuyas condiciones fueron incumplidas por parte de la empresa.