La gestión de la Fundación Municipal de la Mujer (FMM) pasa totalmente desapercibida en la ciudad, ya que este ente sólo hace acto de presencia en el 25N, por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres o en el 8M- Día Internacional de la Mujer. El resto del año ha quedado relegada a un segundo lugar, indignando a las asociaciones de mujeres que hacían uso de estas dependencias municipales.
La programación municipal está paralizada, quedando reducida a los talleres Empoderarte, que en la anterior legislatura se llamaban ‘Tu tiempo en...’ Tampoco se tienen noticias sobre la Escuela de Igualdad ni se ofrece información en la web sobre el antiguo programa Alerta, al que, al parecer, también le han cambiado el nombre.
Según ha podido saber este medio, la actuación de la concejala de la Mujer, Ana Camelo, va dirigida más que nada al cambio de los conceptos porque, según ha declarado en distintos foros, “hasta ahora lo que se había estado haciendo en relación con la Mujer no tenía nada que ver con el concepto de la igualdad de género”.
Repaso
Tampoco se sabe nada de la nueva convocatoria del programa Clara, que contaba con la aportación del Gobierno central, y que va dirigido a promover la inserción laboral de las mujeres. Con dicho programa se pretendía mejorar sus expectativas y su calidad de vida.
Desde que se cambiara la Corporación municipal, con la alianza de Por Cádiz sí se Puede y Ganar Cádiz en Común, con la abstención del PSOE, “esta delegación está al ralentí”. Tanto es así que “está sin convocar el Consejo Rector de la Mujer, que con carácter ordinario se tenía que citar, por lo menos, una vez cada dos meses”.
La última vez que se convocó dicho consejo fue para abordar la destitución de la anterior gerente de la Fundación. Para la búsqueda de su sustituto se pedían una serie de requisitos que incluía que los mismos tuvieran, “al menos, tres años de trayectoria profesional, un máster en igualdad de género, postgrado en auditoría de género, experiencia en política local, desarrollo de programas de igualdad y en gestión de personal”.
Al puesto se presentaron tres funcionarios, todos hombres, proviniendo uno del Área de Servicios Sociales y los otros dos de la Policía Local. Pero ninguno respondía a las exigencias del Gobierno Local que votó a favor de declarar desierta la plaza.
Ante dicha actuación, dos de los que optaban al puesto presentaron alegaciones. Mientras tanto, nada se sabe de la respuesta a dichas alegaciones por parte del Gobierno local.
Por otro lado, entre los cambios que ha traído el nuevo Gobierno local, además de las designaciones de los distintos programas municipales, está también el cambio de personal.
A la destitución de la gerente se une también el traslado de la segunda de a bordo del Área municipal de Contratación a la Fundación de la Mujer.
Por su parte, la concejal del Grupo Municipal Popular, Mercedes Colombo, ex edil de la Mujer, denunció que “este equipo de Gobierno no permite que la oposición participe en los actos del Día de la Mujer. Actúan como si fueran regímenes hitlerianos y no se cortan un pelo”. La portavoz popular asegura que “no se tiene en cuenta a las asociaciones de mujeres que han trabajado siempre con el Ayuntamiento, y ahora resulta que han aparecido asociaciones feministas que se han creado hace pocos meses”.
Según Colombo, no han formado parte del Consejo de la Mujer, “y de repente han florecido de la nada”.
A juicio de la representante del PP, no se puede actuar con tal carácter “marginador, no dando su sitio a asociaciones que llevan años trabajando a favor de la igualdad, y dedicarse a darle connotación política a una Fundación que lleva años funcionando a favor de la mujer”.
Mercedes Colombo teme que desde el equipo de Gobierno, en especial la delegada municipal del área, Ana Camelo, lo que pretenda sea acabar con la Fundación, no darle su sitio. “La actuación que viene desempeñando el Gobierno local tiene toda la pinta de pretender cargarse la Fundación Municipal de la Mujer, que es un órgano donde participan los grupos de la oposición”. Según la edil, “al no creer en este órgano acabará siendo una Concejalía donde las asociaciones no tendrán ni voz ni voto”.
