“Boicoteamos la charla porque se hizo apología de la tauromaquia”. Así lo consideran los activistas que protagonizaron la interrupción de la conferencia ‘De la tauromaquia a caballo al toreo a pie. Los toreros de Chiclana de la Frontera en los siglos XVIII y XIX’, incluida en el V Ciclo de Conferencias de Jóvenes Historiadores, organizado por el Ayuntamiento de Cádiz y la asociación universitaria Ubi Sunt.
Los cuatro jóvenes acudieron a la Casa de la Juventud provistos de carteles pero “en ningún momento pensábamos interrumpir, hasta que se hizo apología de la tauromaquia, se enalteció denominándolo arte”. En ese momento, uno de los activistas cortó la conferencia para indicar que eso no era arte, que era maltrato animal. No obstante, dicen que no sacaron los carteles.
Indican durante el relato de su versión que “allí todo el público estaba relacionado con el mundo de los toros, a excepción de dos o tres estudiantes que se verían obligados para obtener puntos”. Por ello, también mantienen que la Casa de la Juventud no era el lugar para impartir una charla, donde la media de edad superaba los 35 años, “edad límite para acceder al citado equipamiento municipal, porque eso estaba siendo usado por gente que no era joven”.
Los jóvenes que irrumpieron en la conferencia aseguran que entre la gente que allí había “se nos amenazó y nosotros reaccionamos”. En el momento en el que se calmaron los ánimos, el conferenciante pudo seguir con su charla hasta que defendió “como bueno que a España se la conociera fuera de sus fronteras por la tauromaquia”. Según estos proteccionistas, “el tono se elevó y recibí un empujón de uno de los asistentes, al que le devolví el mismo empujón”.
En ese momento, uno de los activistas se colocó junto al conferenciante con el cartel informativo contra el maltrato animal.
En el patio de la casa de la Juventud “había dos policías locales que nos dieron la razón”. Aseguran que “nunca se faltó el respeto, mientras que nosotros recibimos los insultos de los defensores”.
Los jóvenes se niegan a “creer que el Ayuntamiento permita que se fomente la tauromaquia, porque si han quitado los circos de la ciudad, y se ha quitado la campaña de recogida de palomas, es incomprensible que admitan este tipo de conferencias. Al final se han cachondeado, pero esperamos que rectifiquen en próximas convocatorias”, concluyen.
