El Partido Vecinal Regionalista ve como un caso insólito que el Partido Socialista, y otros, pidan un Pleno extraordinario en plenas elecciones municipales y, además, para reclamar una comisión de investigación sobre los acuíferos del extrarradio de Chiclana, dada la contaminación de sus aguas.
El PVRE piensa que este es un asunto más utilizado por el Sr. Román, IU y Sra. Castilla, como arma arrojadiza, que como una manera de buscar una rápida solución a tan grave problema. Hasta ahora se utiliza un supuesto informe (el PVRE, ha día de hoy, sigue sin haberlo visto) entregado a la alcaldía y, desde ahí surgen acusaciones políticas y personales, que nada resolverán, a favor de las que utilizan esos acuíferos.
El Partido Socialista ha gobernado el Ayuntamiento de Chiclana desde hace más de 30 años y, desde 1996 hasta 2011, dos alcaldes, el Sr. Jiménez Barrios y el Sr. Román, época en la que surgieron cerca de 20.000 pozas para vertido de fecales y otros desechos. Estos Sres. Son conocedores a la perfección del estado de esas aguas que consumen y utilizan más de 46.000 vecinos.
Ya en 1999, el Sr. Román firmó como alcalde, una Ordenanza, la Nº14, supuestamente para regularizar viviendas, y reclamaron a los vecinos de todo el extrarradio un adelanto de dinero (85.000 pesetas) que depositaron en Tesorería cientos o miles de vecinos de Chiclana. Del total, 40.000 pesetas eran como adelanto para infraestructuras de servicios básicos, pues bien, nunca se volvió a saber nada ni de los servicios, ni del dinero que depositaron los vecinos, y eso que en aquel entonces ya sabía el PSOE que el agua estaba contaminada.
En 2009/2010, el Sr. Román (PSOE), vuelve a la carga con otra Ordenanza que se basaba en un Plan General anulado por la Justicia desde Enero de 2009, y otra vez volvía a pedir dinero por adelantado para una supuesta regularización, cosa que tampoco podía hacer, pero no se conformó solo con eso, sino que impuso unas cantidades a pagar que eran muy superiores a las que ya cobraron en el pasado.
Para el Sr. Román y el PSOE, su prioridad y su obsesión, es “sacar” el dinero a los vecinos como sea, y siempre a cambio de nada, usando todo tipo de subterfugios. Ya dejó claro en declaraciones a los medios de comunicación: “si se quiere agua, hay que pagarla”… pues bien, el Sr. Román quiere olvidar que muchos vecinos ya la pagaron pero no la tienen, como hemos indicado, estando el Sr. Jiménez Barrios y el mismo Sr. Román en la alcaldía.
El PVRE ya dio en su momento una aproximación de los precios para el agua y alcantarillado, los cuales el PSOE se ha dedicado a ironizar y falsear, pero aún así, desde el Partido Vecinal presagiamos que serán más baratos aún, y desde el PSOE lo saben.
Pero volviendo al asunto de los acuíferos, ahora resulta que los máximos responsables, tanto desde la Junta de Andalucía, como desde el Ayuntamiento, que practicaron una dejación de funciones durante años, pretendan convertirse en acusadores de los que no tuvieron responsabilidad alguna.
Queremos suponer que el Pleno Extraordinario que solicitaron no les sirva para hacer su espectáculo de desgarre de vestiduras, porque conociendo los personajes, el teatrillo puede estar asegurado. Por otra parte, todos conocemos el dicho: “Si quieres que algo no se sepa, nombra una comisión”.
Por todo ello, les comunicamos que el Partido Vecinal Regionalista remitió el mes pasado una documentación a fiscalía, junto con pruebas del efecto de esas aguas contaminadas sobre la salud de las personas, para que sea dicha autoridad quien de verdad, no solo investigue lo que proceda o a quien proceda, sino para que se dé un impulso final a la reivindicación que el Partido Vecinal hace desde que nació, que los vecinos puedan contar con agua potable, pero que la Junta de Andalucía, y el PSOE de Chiclana (junto con otros actores en segundo plano) han impedido que se lleve a cabo.
Desde el PVRE siempre hemos defendido la instalación de los servicios básicos en Chiclana, a unos precios reales, justos y asequibles para todos, terminando así con el grave problema que desde hace décadas amenaza la salud de decenas de miles de personas y animales.
