Ante el prolongado y preocupante silencio judicial, finalmente, el Recreativo encontró acomodo para poder disputar su partido de la próxima jornada, la novena, ante el Barbate: el lugar será el campo de césped natural de la Ciudad Deportiva portuense.
Tal y como anunciábamos en este mismo periódico, la propuesta de jugar en el de albero no obtuvo el OK preceptivo de la Federación Gaditana de Fútbol, que denegó -tal y como hiciera hace algunos años al Racing B- el poder disputar su partido, al entender que no se cumplen con las mínimas medidas de seguridad para un partido de estas características.
El Reglamento es claro y categórico en la proximidad cercana de los vestuarios tanto de jugadores como el trío arbitral. Así, en el Libro I del Reglamento de la propia Federación en el Capítulo II de Los terrenos de juego en su artículo 116 recoge que “el terreno de juego deberá tener valla interior, y los vestuarios situados dentro del recinto del campo” así como que “el recinto deberá estar vallado, contando con un paso protegido hasta los vestuarios para el equipo arbitral y los futbolistas“.
El encuentro ante el equipo jandeño se disputará el domingo a las 12.00 horas.
A la espera de los acontecimientos que se vayan produciendo en los próximos días, algunos de los pesos pesados -a los que el domingo se les abrió la puerta de salida ante la más que presumible imposibilidad de afrontar los pagos- se tomarán hasta el lunes como día límite para normalizar una situación insostenible.
