El alcalde de El Puerto de Santa María, Germán Beardo, acompañado del teniente de alcalde de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, Millán Alegre, se ha trasladado hasta la antigua Rotonda de 501, en la antigua Nacional IV, donde hoy el Grupo Q ha comenzado las labores de desbroce y demolición para iniciar su remodelación, tras el trágico accidente ocurrido en septiembre del año 2017, cuando un camión de grandes dimensiones que venía de Portugal se empotró con la glorieta rompiendo gran parte de la estructura actual.
Cabe destacar que la nueva construcción cambiará sustancialmente la imagen de esta entrada y salida principal de la ciudad, que lleva años mostrando un aspecto de deterioro y decadencia insostenible; cumpliendo así con una de las reivindicaciones más generalizadas de los vecinos de El Puerto.
Germán Beardo explica que ha sido una de las prioridades del equipo de Gobierno al presentar un estado lamentable y al ser una de las vías de acceso principales de la ciudad, con un gran volumen de tráfico.
El primer edil de la ciudad que ha supervisado sobre el terreno el inicio de las obras recuerda que esta actuación no costará ni un céntimo al Ayuntamiento de El Puerto de Santa María, gracias a la colaboración del Grupo Empresarial Q, encargado del desarrollo urbanístico de Rancho Linares, donde comenzarán en breve a construir unas 1260 viviendas, cuya entrada y puerta de acceso a la urbanización es esta glorieta que pasará a denominarse “El Puerto Norte”.
Con una inversión aproximada de 60.000 euros, el diseño de la rotonda será un guiño a El Puerto como ciudad marinera y centro neurálgico de importantes regatas a nivel internacional; combinando elementos propios de El Puerto de Santa María tales como la vela, el mar o la bahía.
La rotonda “El Puerto Norte” contará con varias velas en acero corten y tendrá tres partes bien diferenciadas: una de tres metros de ancho en todo el perímetro compuesto de grava, una central de piedra imitando al mar y el resto del espacio disponible se mezclan zonas de macizos con distintos tipos de vegetación y una pradera verde. La iluminación se centrará en destacar la zona de las velas de chapa cubiertas de acero, la zona de las letras y por último los cuatro ejemplares de olivo que se mantienen en el proyecto, con focos colocados en el suelo dirigidos a destacar dichos elementos y contará, por supuesto, con riego automático.
Germán Beardo señala que el periodo de ejecución aproximado es de 3 meses y es una empresa local, Firmes y Carreteras, la responsable de su construcción. Por tanto, se espera que esté concluida esta primavera.
La Concejalía de Medio Ambiente es el área municipal encargada de supervisar el desarrollo y ejecución del proyecto.