La organización agraria, ante estos acontecimientos, está realizando las primeras valoraciones en cada una de las áreas de la agricultura y la ganadería onubense, que tras más de 15 días de temporal prácticamente ininterrumpido, arrojan pérdidas en cultivos e infraestructuras.
Subsectores
De este modo, por subsectores, en la fresa el 40 por ciento de la llamada ‘de primera floración’ está perdida, y se está originando un retraso significativo en la campaña. A esto hay que sumar que los desperfectos causados por el viento y las violentas lluvias en plásticos e invernaderos supondrán un gasto adicional, a lo que añadieron que la humedad constante podría, además, provocar malformaciones y mala calidad en el fruto que aún está por salir.
Por su parte, la Costa y el Condado-Campiña son las zonas más afectadas. Es en estas comarcas, fundamentalmente freseras, citrícolas y cerealistas, donde más afectados están los cultivos, a lo que hay que sumar los daños en las estructuras agrarias.
Asimismo, en la Sierra y el Andévalo, y al margen de los daños causados en la alimentación de los animales de cría en extensivo, las pérdidas más cuantiosas se registran de momento en las infraestructuras de las fincas.
En cítricos y cereales se esperan también pérdidas debido al mal tiempo. El único punto positivo de las lluvias, que se han caracterizado por su excesiva constancia y virulencia, es el balance de agua embalsada en los pantanos.