Según las últimas encuestas, Sarkozy perdería por entre 5 y 7 puntos respecto al candidato por el Partido Socialista, François Hollande, en los comicios para el Elíseo.
Alain Minc, amigo del actual presidente y asesor directo, ha señalado que "si (Sarkozy) es derrotado, pero consigue hasta el 48 o 48,5 por ciento de los votos, con gobiernos perdiendo en todas partes debido a la crisis económica, no sería un completo fracaso". "Veremos qué decide hacer", ha indicado.
Minc ha explicado que Sarkozy podría no retirarse de la política si emerge como "fuerza creíble" si pierde por un pequeño margen. Varios analistas han señalado que el partido de Sarkozy, la Unión por un Movimiento Democrático (UMP), podría desmembrarse si en las elecciones legislativas de junio la ultraderecha del Frente Nacional consigue superarles.
El actual presidente ha vuelto a insistir este viernes en una entrevista con la radio Europe 1 que "si el pueblo elige a la otra opción, todo habrá acabado". Minc ha comentado que el camino de la derecha está abierto ante el posible triunfo de Hollande tras 17 años de presidentes de partidos conservadores.
Minc ha explicado que Sarkozy podría compartir el poder en la oposición con Jean François Cope, exministro de Economía, portavoz del Gobierno y que actualmente dirige la UMP. Cope ya ha manifestado su intención de concurrir en el futuro a unas elecciones presidenciales. "Lo que pase en la derecha depende de lo que haga Sarkozy. ¿Se retirará de la política? ¿Crees que si decide hacerse con la UMP, Cope podrá resistir?", ha preguntado.
El asesor de Sarkozy ha señalado que la pérdida de las presidenciales podrían limitarse si en las legislativas la UMP consigue 250 escaños, un descenso desde los 339 con los que cuenta en la actualidad, aunque ha indicado que si obtiene 120, sería "dramático".
La líder del FN, Marine Le Pen, consiguió el 17,8 por ciento de los votos en la primera vuelta de las presidenciales. El empuje de Le Pen podría polarizar a la derecha de cara a las legislativas de junio. Minc ha señalado para estos comicios, la UMP solo podría pelear con el argumento de que los franceses no le den todo el poder a los socialistas, después de que en 2011 pasasen a tener la mayoría en el Senado y dos terceras partes de las municipalidades.