Strauss-Kahn ya figura como imputado por un tribunal por el cargo de "proxenetismo en banda organizada", lo que podría costarle una pena de hasta 20 años de cárcel. El nombre de Strauss-Kahn aparece como cliente de una red de prostitución que suministraba mujeres a clientes del hotel Carlton de Lille y en fiestas celebradas en otros lugares como París o Washington.
Una de las chicas interrogadas en el marco de este caso, la belga Marie-Anne S., de 25 años, declaró ante las autoridades que cuatro hombres utilizaron métodos violentos para tener sexo con ella y con otra de sus compañeras.
La testigo explicó que en este suceso, que data del 16 de diciembre de 2010, participaron Strauss-Kahn y otras tres personas identificadas como Jean-Christophe Lagarde, Fabrice Paszkowski y David Roquet, según ha informado el diario 'Libération', que sitúa estos interrogatorios a finales del año pasado.
Según la joven, el antiguo responsable del FMI "utilizó la fuerza" contra ella. "Me cogió las manos, me tiró del pelo, me hizo daño", relató, al recordar también cómo le dijo a Strauss-Kahn que no quería mantener sexo. Los otros tres hombres supuestamente no intervinieron en la escena e incluso Roquet participó sosteniendo las manos de esta chica.
La otra prostituta, Aurélie D., ha matizado el relato de su compañera diciendo que, aunque parecía estar pasándolo mal por las acciones de Strauss-Kahn, no se negó a mantener relaciones. "Si ella no quisiese, si hubiese gritado, habría intervenido", ha recordado, si bien ha admitido que pudo no haber oído a Marie-Anne.
Ninguna de las mujeres ha presentado denuncia por estos hechos, pero los jueces solicitaron el pasado 28 de marzo a la fiscalía de Lille una posible imputación adicional contra los cuatro hombres.
