Los taxistas de Madrid han acordado vender parte de su sede, situada en la calle Santa Engracia, en el centro de la capital, para fortalecer su balance y contar con recursos para hacer frente a la competencia que plantean los vehículos de alquiler con conductor (VTC).
La venta ha sido aprobada en asamblea extraordinaria de la Asociación Gremial de Auto-Taxi Madrid por 237 votos a favor y 83 en contra, según informó Fedetaxi.
La asociación colgará así el cartel de 'se vende' en parte de la superficie que ocupa su sede social, ubicada entre los números 82 y 84 de la calle Santa Engracia.
En concreto, los taxistas venden la planta baja y el sótano, con lo que trasladan su sede a la superficie que tienen en pisos superiores del inmueble, según detallaron en fuentes de la asociación, que aseguran contar ya con ofertas de compra.
Con esta desinversión, planteada por la junta directiva que preside Miguel Ángel Leal, los taxistas madrileños buscan garantizar la solvencia de la asociación y, al tiempo, lograr recursos para competir con el VTC.
En concreto, el gremio prevé destinar el importe que obtengan a "pagar a los acreedores" y a "apostar por un nuevo modelo de negocio digital que aumente los ingresos de sus socios y de la asociación y, a la vez, permita dar un servicio de mayor calidad a los socios y a los usuarios del taxi, y competir con los nuevos modelos de movilidad".
Precisamente, la asociación achaca la situación que presentan sus cuentas a la 'batalla' que el sector libra desde hace años con la, según consideran, "competencia desleal" de los VTC.
ESFUERZO ECONÓMICO DE LUCHA CONTRA VTC.
"Hemos hecho un gran esfuerzo económico para defender a todos los taxistas de España que ha repercutido negativamente en las cuentas de la gremial", aseguró el presidente durante la asamblea. "Pero era eso o aceptar que nuestro sector desapareciera por completo", aseveró.
La asociación estima que, con la venta parcial de la sede acordada ahora, "en un contexto económico negativo para el sector del taxi por la irrupción de las VTC", los taxistas madrileños de Gremial "recuperan la tranquilidad económica" para proseguir "en el liderazgo del servicio público del taxi" e invertir en una tecnología que será la respuesta del taxi a las plataformas digitales.
Según asegura, dicha nueva tecnología se pondrá en el mercado antes de fin de año.
Los taxistas de Madrid toman esta decisión apenas una semana después de que el Gobierno aprobara un Real Decreto Ley de medidas para las VTC.
En virtud de esta norma, las comunidades autónomas y los ayuntamientos ya pueden entrar a regular las condiciones del servicio de estos vehículos igual que hacen con los taxis, si bien da una moratoria de cuatro años para que entren a regular su número de licencias.
