El Parlamento andaluz instó ayer al Gobierno de la nación a aprobar un decreto de sequía que tenga a Andalucía como uno de los territorios más beneficiados, y que ejecute las obras pendientes que viene reclamando durante los últimos años. La Cámara andaluza debatió ayer dos propuestas -una del PSOE y otra del PP- en materia de sequía, y la iniciativa de los socialistas de crear un grupo de trabajo en sede parlamentaria que analice la situación de la sequía con todos los agentes sociales implicados ha sido respaldada por todos los grupo y ha contado con el único rechazo de Vox.
La proposición no de ley del PP fue aprobada e insta al Gobierno central a ejecutar obras hidráulicas “de interés general del Estado” en diversas provincias andaluzas, entre ellas la desaladora de carboneras, la totalidad de las conducciones de la presa de Rules (Granada) y Siles.
La presa de Siles, finalizada en 2015 y a expensas aún de sus conducciones es, pues, la única obra hidráulica que Andalucía reclama al Gobierno central. Enla Proposición del PP se ignoran otras infraestructuras hidráulicas ya construidas, como la Balsa del Cadimo, e incluso otras planificadas con anterioridad, como la Presa de la Cerrada de la Puerta o la ampliación del Guadalmena.
