La hermandad tiene su desfile procesional el Miércoles Santo desde que se produjera su primera salida en 1937. En su desfile predomina el silencio
La Venerable Archicofradía de Nuestra Señora del Carmen y Hermandad de Penitencia del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, Nuestra Señora del Mayor Dolor y San Juan Evangelista es una de las hermandades de más raigambre y tradición de la ciudad.
La actual Corporación nace de la fusión en 1988 de la cofradía del Carmen y la hermandad de la Buena Muerte. Como cofradía, es la más antigua de Algeciras, ya que el Carmen data de mediados del siglo XVIII.
La hermandad de penitencia, siendo de las más antiguas, es menos longeva que el Santo Entierro. Su primera salida procesional se produce en el año 1937, en plena Guerra Civil.
Desde entonces, ha mantenido su empaque de sobriedad y seriedad. En 1967 deja de procesionar, pero es en 1974 cuando el padre Cruceyra la recupera para la tradición cofrade algecireña.
Uno de los hitos de la hermandad se produce en el año 1976, cuando el padre Cruceyra, junto con Emilio Buch, entonces director de la escuela Ventura Morón, forman la primera cuadrilla de hermanos cargadores.
Hasta entonces, los pasos los cargaban los trabajadores portuarios, que cobraban por ello. Con esta iniciativa nacía la que, por ello, será conocida como hermandad de los estudiantes, que sería el germen de las actuales cuadrillas algecireñas de cargadores.
Su salida en procesión por las calles de Algeciras es una de las más imponentes. Es de las hermandades denominadas de medio silencio, ya que el Cristo sólo lleva una música de capilla (trío de clarinete, fagot y flauta, que interpretan motetes y música barroca); y la Virgen lleva una banda que sólo toca marchas fúnebres.
Su iconografía es la de un Cristo ya muerto, que se corresponde con el capítulo 19 de San Juan, con el Cristo ya expirado, y la lanzada en el costado. Por ello, la seriedad y el silencio predominan en su desfile.
El Cristo es una imagen tallada de Luis Álvarez Duarte, de 1983. La antigua imagen reposa en la capilla, obra de los talleres de Olot, de escaso valor artístico, pero de un alto impacto vocacional en los algecireños.
La Virgen, es obra del imaginero sevillano Antonio Castillo Lastrucci, de 1939. Una de las particularidades es la del manto de la Virgen, que fue donado por Baldomero Benítez, padre del desaparecido Reyes Benítez, que la comprometió si su hijo volvía de la guerra. Es obra de Juan Manuel Rodríguez Ojeda, de 1914, uno de los mejores bordadores de la historia, y perteneció a la Virgen del Rosario, de la Macarena de Sevilla.
El hermano mayor, José Manuel Triano, apunta que este año no habrá ningún estreno significativo, dadas las actuales circunstancias económicas, si bien se contará con la banda Amando Herrero, después de que el año pasado interpretara la banda de Sanlúcar la Mayor.