El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha abogado este miércoles por una relación "estable" entre las bodegas de esa región y las destilerías de Jerez y de su zona, debido a la "gran conexión" y la "perfecta simbiosis" entre ambas para la elaboración de brandy de Jerez desde hace más de un siglo.
En declaraciones a los periodistas durante una visita al Consejo Regulador del Brandy y del Vino de Jerez, a la que ha asistido también el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, el consejero ha destacado la "relevancia" de los acuerdos entre las bodegas su comunidad y las destilerías de Jerez y de su región para dar una "nueva salida" al mercado que les permita "planificar el sector del vino".
En este sentido, ha insistido en la "importancia" de la "colaboración" con las bodegas del Marco de Jerez y ha animado a las que tienen destilerías en Castilla-La Mancha a que establezcan contratos "a largo y medio plazo" con las de esta zona en aras de un suministro "estable" y de la "vertebración" del sector vitivinícola.
De igual manera, en la reunión de trabajo mantenida previamente con la directiva del Consejo Regulador del Brandy y del Vino de Jerez, el Gobierno castellanomanchego ha mostrado su "compromiso" para que el brandy de Jerez y el que no sea de Jerez se siga elaborando en el futuro "exclusivamente a partir de la uva, y por tanto a partir de vino", al considerarla la base de la economía de Castilla-La Mancha y de parte de Andalucía.
Durante la visita, los dirigentes castellanomanchegos han estado acompañados por el presidente del Consejo del Brandy, Evaristo Babé, y el director del Consejo Regulador del Vino de Jerez, César Saldaña.
