Para la oposición existen dos puntos en esta controversia. En primer lugar se refiere a la cláusula acordada por los ministros en el Foro, que establece que “las designaciones de Lugares de Interés Comunitario y las decisiones de la Comisión Europea, no tiene implicaciones y no modifica la soberanía, jurisdicción y control de las aguas a las que se refieren, que según esto permanecen tal y como estaban con anterioridad”.
Socialistas y liberales argumentan que la palabra “designaciones” está en plural, por lo que señalan que este párrafo se refiere tanto a la designación realizada por España como a la previamente establecida por el Reino Unido en 2006. Para socialistas y liberales este juego de palabras es una “chapuza completamente inaceptable”.
El segundo asunto al que se refiere la oposición en el controvertido tema de las aguas, son las incursiones de las lanchas de la Guardia Civil, que informan se siguen produciendo e incluso un día después de la visita de Moratinos la Guardia Civil se negó a responder a una llamada de la Royal Navy.
La oposición considera que el Gobierno ha manejado mal el asunto y que esto podría tener serias consecuencias en el futuro, responsabilidad que recaerá sobre los hombros del ministro principal y el actual Gobierno.