La Casa Invisible gana otra batalla al Ayuntamiento de Málaga al lograr que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 4 haya dado la razón al centro cultural y deniegue la autorización de entrada, que el Consistorio había pedido por segunda vez, para desalojar el inmueble.
“Esperemos que aprenda la lección y cierre la puerta definitivamente a los atajos”“Era crónica de una denegación anunciada”, ha indicado la abogada Amanda Romero. Los rifirrafes entre los responsables del edificio okupado desde 2007 y el Ayuntamiento se remontan a 2018, cuando La Casa Invisible recurrió la denegación de cesión del espacio y el desalojo.
El Ayuntamiento “persistió en la actitud de recurrir a la fuerza para desalojar y volvió a solicitar en octubre de 2022 una nueva autorización de entrada, que ha vuelto a ser denegada”, ha explicado. En la resolución la titular del Juzgado señala que ya existe un procedimiento judicial principal, para la cesión del espacio, que está a la espera de sentencia, por lo que no se es posible llevar a cabo el desalojo del inmueble sin vulnerar el derecho a la tutela judicial efectiva, lo que obliga a esperar al dictado de la sentencia. Este último proceso judicial emprendido por el Consistorio es “fruto de las prisas y tiene una clara intención de coger atajos”, a ojos de Romero.
La decisión del juzgado, según ha dado a conocer, trata de evitar que una futura sentencia de cesión favorable a La Casa Invisible no pudiera llevarse a cabo si previamente se ha desalojado el edificio.
Tras esta resolución la letrada Amanda Romera espera que el gobierno municipal “aprenda la lección” y “que cierre la puerta definitivamente a los atajos que pretenden pasar por encima de garantías procesales y de respeto a derechos fundamentales”, ha dicho, además de pedir al Ayuntamiento que “abandone definitivamente la vía de la fuerza” para resolver el conflicto que existe con La Casa Invisible y opte por alcanzar “una solución dialogada”.
Desde La Casa Invisible han destacado que los apoyos nacionales e internacionales que ha recabado en sus dieciséis años acaba de sumarse el Fondo Mondriaan, una fundación pública de arte holandesa que ha concedido 40.000 euros al proyecto “La rehabilitación de La Casa Invisible” impulsado por Libia Castro y Ólafur Ólafsson, ganadores del Premio Nacional de Arte de Islandia 2021. Dentro de esta financiación, el Fondo Mondriaan prevé 15.000 euros para estudios previos para la ejecución del proyecto básico de rehabilitación presentado por La Casa Invisible en 2016.