El precio de la vivienda en Málaga aunque sigue aumentando, ha moderado su crecimiento. En el tercer trimestre de 2019 el coste de un inmueble en la capital es de 3.036 euros por metro cuadrado, 21 euros más caro en comparación con el segundo cuatrimestre de este ejercicio, una variación del 0,70 por ciento.
Estos datos siguen situando al
2019 como el tercer año más caro, como ya adelantó el primer trimestre de este año (2.992), solo por detrás de 2007 (3.190 euros por metro cuadrado) y 2006 (3.181), desde 1980, según datos del Observatorio de Medio Ambiente Urbano (OMAU).
Respecto al mismo trimestre del 2018, se ha registrado un aumento de
176 euros por metro cuadrado, ya que la cifra que se alcanzó en el ejercicio anterior fue de 2.860 euros por metro cuadrado. Este crecimiento significa una variación del 6,15 por ciento en tan solo un año.
Desgranando los datos de la ciudad, en el Litoral Este es donde se ha experimentado el incremento más alto del precio, respecto a los tres meses anteriores. La diferencia entre el segundo y tercer trimestre del mismo año es de 1,82 por ciento, pasando de 4.874 euros por metro en el segundo trimestre de 2019 a
4.962 en el tercero del mismo año. Lo que da lugar a 88 euros más por metro cuadrado más en tres meses.
A esta zona le siguen el
Centro (4.456 euros por metro cuadrado) y las
Pedrizas (2.318 euros por metro), donde la variación en estos tres meses transcurridos es de 0,63 y 0,69 respectivamente.
Así, también destaca Teatinos (2.683 euros por metro cuadrado). En esta zona de la ciudad el precio de la vivienda ha incrementado un 0,56 por ciento con respecto al pasado segundo trimestre, suponiendo una subida de quince euros por metro cuadrado.
En resumen, las zonas de Málaga capital donde es más comprar un inmueble son, en orden de mayo a menor: el Litoral Este y el Centro.
Áreas y municipios de Málaga
Marbella es la z
ona de la provincia donde es más cara la vivienda. En el tercer trimestre de 2019 el precio fue de 3.851 euros por metro cuadrado, 459 euros más, una variación anual del 13,55 por ciento.
Le sigue Nerja, donde el coste es de 3.192, un 3,59 por ciento más, lo que significa 111 euros más.
Málaga capital ocupa la tercera posición, con 3.036 euros por metro cuadrado.
La zona malagueña que registró un mayor crecimiento en el tercer trimestre de 2019 con respecto al mismo periodo del año anterior es Estepona donde el precio en 2018 era de 2.191 euros por metro cuadrado y en este ejercicio
se alcanzaron los 2.498 euros, una variación del 14,04 por ciento.
En contraposición, el municipio de Alhaurín de la Torre ha registrado la subida más baja, un 0,98 por ciento durante este ejercicio en relación al mismo periodo de 2018. En el tercer trimestre del pasado año el coste por metro cuadrado era de 1.778, mientras que ahora es de 1.795 euros. Asimismo, al comprar con el segundo trimestre de 2019, se ha producido un descenso del 0,17 por ciento, dando lugar a un incremento de tres euros el metro cuadrado en el tercer trimestre.
La
media provincial en julio, agosto y septiembre de este ejercicio es de
2.823 euros por metro cuadrado, 316 euros más que en el 2018, cuando se alcanzaron los 2.507euros. Una variación anual del 12,60 por ciento.
Al comprar el tercer trimestre con el segundo la variación es de un 0,93 por ciento, pasando de los 2.797 en el segundo trimestre de 2019 a 2.823 en el tercero, 26 euros más por metro cuadrado.
Problemática
Los datos reflejan un aumento global de los precios de los inmuebles, pero de forma más moderada que la que se venía registrando en trimestre y años anteriores.
Una parte “muy considerable” de la demanda “no la forma la población residente, si no por grupos de inversión” de otras zonas de España o de Europa que consideran Málaga como “un buen lugar donde destinar sus recursos”, viene recalcado en el informe.
Desde el OMAU advierten que estos ámbitos de inversión son “muy sensibles a la inestabilidad” de la economía y a la “precariedad” de la situación política a nivel internacional y nacional. Las amenazas de recesión económica en algunos motores de la economía europea, las consecuencias de un
brexit británico abrupto o la puesta en marcha de la nueva ley hipotecaria están “enfriando las expectativas del mercado inmobiliario”, han dicho. Sin embargo habrá que “esperar razonablemente para constatar esta retracción temporal del mercado inmobiliario”, han matizado.
Ello obedece a la dualidad económica y que muestra “a una parte importante de la población que por sus niveles de precariedad económica o desempleo no solo no tienen posibilidades de adquirir una vivienda o acceder a un alquiler”, han lamentado desde el OMAU. Siendo la situación “especialmente crítica” con los jóvenes que “deben destinar prácticamente su sueldo al acceso a una vivienda”, han indicado.